Ante las declaraciones de la Confederación de Federaciones de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado de Centros Públicos de Enseñanza de Castilla y León (Confapacal) recogidas hoy por algunos medios de comunicación, la Consejería de Educación señala que la Administración educativa autonómica, a través de las ayudas individuales y el Programa ‘Releo’, destinará en el año 2016 más de 14 millones de euros para la gratuidad de libros de texto. Asimismo, el departamento que dirige Fernando Rey subraya que apuesta decididamente por dicho programa de préstamo y reutilización de libros de texto, destinando más de 10 millones de euros el próximo curso escolar.
La Consejería de Educación redoblará sus esfuerzos en favor de la equidad educativa, convirtiéndola en una de sus principales líneas de actuación, profundizando en el camino emprendido en los últimos años y cumpliendo con el compromiso contraído al comienzo de la legislatura.
Para ello, la Administración educativa autonómica apuesta por la extensión del Programa ‘Releo’, de préstamo y reutilización de libros de texto, a los que dedicará una inversión de más de tres millones de euros, destinados a los centros públicos participantes en el programa, que suponen el 42 % del total.
Por otro lado, adelantándose varios meses a lo que venía siendo habitual, la Consejería de Educación acaba de publicar una convocatoria de ayudas individualizadas para familias con rentas inferiores a 1,5 veces el IPREM, tanto de centros públicos como concertados, con la novedad de que el importe de las ayudas cubrirá la totalidad del coste de los libros, y la importante condición de tener que ser cedidos al centro a la finalización del curso escolar.
Asimismo, la Consejería de Educación señala que las familias deberán adelantar el pago de los libros, pero en la actualidad también lo hacen. La diferencia estriba en que ahora recibirán la totalidad del importe antes de terminar el año, mientras que en convocatorias anteriores no se cubría todo el importe y se pagaba al año siguiente, debiendo adelantar los padres el dinero por un periodo de seis meses, mientras que ahora está previsto que cobren en tres meses desde que se presente la factura justificativa.
En realidad, la mayoría de las familias que percibían la ayuda se verán beneficiadas en esta convocatoria y recibirán el importe total de los libros de texto -la estimación de beneficiarios es de más de 40.000- siendo una minoría de las que recibían ayudas por importe de 75 o 50 euros, las que no la percibirán en esta convocatoria y solo con un carácter transitorio. No obstante, se pude afirmar con seguridad que muchas de estas familias obtendrán los libros gratis en el marco del programa ‘Releo’.
Incremento en ‘Releo’
La Consejería de Educación se propone promover más que nunca los programas de intercambio de libros, como el programa ‘Releo’. De hecho, se incrementan los fondos acumulados en los centros en cursos anteriores -de casi cinco millones de euros- con otros 10 millones en el presente curso: los más de tres millones que se incorporarán directamente al programa al comienzo del curso y los siete millones de la convocatoria recién publicada. Estos siete millones, como la convocatoria expone claramente, se ampliarán hasta la cuantía que sea necesaria para cubrir las solicitudes que cumplan los requisitos y los libros se incorporarán a los centros a la finalización del curso escolar.
Una vez resueltas las ayudas individuales y entregados los libros a los fondos de los centros educativos, la Consejería de Educación tiene intención de destinar sus recursos fundamentalmente al mantenimiento de los bancos de libros de los centros, subvencionando el coste de reposición de los que se vayan deteriorando y extendiendo progresivamente el nivel de renta de los posibles beneficiarios, con el objetivo de alcanzar en la medida de lo posible la gratuidad total de los libros de texto para las familias de Castilla y León.
Finalmente, se perfeccionará la aplicación informática de control de los bancos de libros de los centros y se potenciará progresivamente la utilización de libros en formato digital, en la medida en que la adquisición de licencias y la generalización del uso de dispositivos digitales en el aula favorezcan su implantación.