cancer infantil

Tras diez años de investigación, expertos del Hospital Niño Jesús y del Instituto de Salud Carlos III han presentado hoy en rueda de prensa los últimos avances del único ensayo en terapia avanzada sobre el neuroblastoma, un tipo de cáncer infantil resistente a los tratamientos convencionales. En España afecta a 50 niños cada año.

Un nuevo ensayo clínico llevado a cabo por investigadores del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús (HIUNJ) y del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) y publicado en la revista Cancer Letters muestra un tratamiento con virus que reduce el índice de mortalidad de los niños con neuroblastoma. El HIUNJ es hasta ahora el único hospital público de España habilitado para aplicar este tipo de terapias avanzadas.

Liderado por Manuel Ramírez Orellana, coordinador del Laboratorio de Investigación de Onco-Hematología del HIUNJ y Javier García Castro, de la Unidad de Biotecnología Celular del ISCIII, el estudio confirma mejoras clínicas en alguno de los pacientes con neuroblastoma sometidos a una terapia celular con oncovirus.

El neuroblastoma es el segundo tumor sólido infantil más frecuente después de los cerebrales. Afecta, principalmente, a niños de entre 4 y 5 años, y suele comenzar en el tejido nervioso de sus glándulas suprarrenales. “En España, son diagnosticados 50 niños al año con este tipo de cáncer, de los cuales la mitad pueden ser curables”, ha explicado Ramírez en rueda de prensa.

El neuroblastoma es el segundo tumor sólido infantil más frecuente. Lo sufren, principalmente, niños de entre 4 y 5 años

Ante la falta de tratamientos farmacológicos efectivos para esta patología, hace una década que este grupo de científicos empezó a trabajar en la búsqueda de una solución que frenara el neuroblastoma pediátrico.

Para ello, recurrieron a la viroterapia oncolítica, una terapia avanzada que se centra en añadir a las células madre mesenquimales (CMM) –obtenidas de la médula ósea de la cresta ilíaca de los pacientes– un adenavirus oncolítico diseñado para eliminar selectivamente células tumorales.

La estrategia terapéutica utilizada se asemeja, según los autores, al caballo de Troya utilizado por los griegos para introducirse en la ciudad sin ser vistos.

“Escondimos el virus capaz de matar células tumorales dentro de las células CMM que tienen la capacidad innata de llegar al tumor”, ha añadido por su parte García. De esta forma, el organismo no ataca a las CMM ya que no es consciente de que en su interior viaja el virus.

Mejoras clínicas en los pacientes

La terapia fue aplicada en 12 niños con neuroblastoma reflectario, a los que le aplicaron semanalmente dosis de Celyvir, nombre que reciben las soluciones intravenosas desarrolladas por los investigadores.

Dichas soluciones intravenosas están compuestas por células CMM infectadas con el virus ICOVIR-5, que se encarga de eliminar las células tumorales. Este virus fue realizado por Ramón Alemany, director del Grupo de Viroterapia del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvige (IDIBELL).

“De los 12 pacientes, cinco manifestaron una respuesta clínica”, ha indicado a Sinc Ramírez. Esta terapia benefició los niños estabilizando el tumor, incitando un estado de remisión o, incluso, provocando su desaparición completa. Los niños que tuvieron una respuesta clínica tenían, de inicio, una mejor salud de su sistema inmunológio.

El sistema inmune, clave del éxito

La respuesta a este tratamiento, según los investigadores, se encuentra acotada y condicionada por el estatus del sistema inmunológico de los pacientes.

“Aquellos niños que tuvieron una respuesta clínica tenían, de inicio, una mejor salud de su sistema inmunológico y un mayor número absoluto de linfocitos en sangre”, ha subrayado Javier García.

El estado de sus defensas puede verse afectado por los múltiples tratamientos, como las sesiones de quimioterapia, que recibieron antes de empezar este ensayo clínico con adenavirus.

Además de eliminar células tumorales, la salida de los virus dentro del tumor “produce un efecto llamada al sistema inmune y lo recluta para atacar al neuroblastoma”, ha manifestado.

Toxicología ‘leve’

Otro de los aspectos más importantes que muestran los resultados es la ‘leve’ toxicología de esta terapia. Según el ensayo, la sintomatología que desarrollaron los enfermos ante los adenavirus oncolíticos comprende fiebres bajas y síntomas gripales como malestar físico.

Para comprobar su eficacia, los investigadores realizaron a posteriori una técnica in vitro que permite identificar anomalías en la secuencia de nucleótidos del ADN. “Hallamos el adenovirus en las células de todos los pacientes, sin encontrar diferencias entre los pacientes que respondieron clínicamente y los que no”, ha declarado Ramírez.

Por la complejidad que implica esta técnica, su producción y uso está estrictamente regulado por la Unión Europea, que ha establecido los requisitos bajo los que debe realizarse este tipo de estudios.

Actualmente, el tratamiento con Celyvir se encuentra en fase 1 de ensayo clínico y tiene previsto extenderse a pacientes adultos con otro tipo de tumores refractarios.

Referencia bibliográfica:

Manuel Ramírez, Javier García Castro et al. «Influence of carrier cells on the clinical outcome of children with neuroblastoma treated with high dose of oncolytic adenovirus delivered in mesenchymal stem cells». Cancer Letters 371 (2016): 161-170

Fuente: SINC