La Sociedad de Investigación y Explotación Minera de Castilla y León (Siemcalsa) ha editado 7.000 ejemplares de un tríptico con la reseña de los 16 centros de interpretación mineros de la Comunidad, que será distribuido, además de en sus propias instalaciones, en oficinas de turismo y ferias del sector a través de la Consejería de Cultura y Turismo. El objetivo es promocionar este patrimonio natural como recurso turístico y factor de dinamización económica de las comarcas donde se encuentran ubicados.
Castilla y León cuenta con 16 centros de interpretación mineros, repartidos por las provincias de Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca y Valladolid, que ofrecen al visitante la posibilidad de conocer el patrimonio y las labores mineras que años atrás fueron la más importante fuente de empleo y riqueza de algunas comarcas.
Se trata de instalaciones ya en desuso que han sido recuperadas para su aprovechamiento con fines didácticos, culturales y turísticos gracias al esfuerzo de vecinos, asociaciones y antiguos trabajadores y al apoyo de las instituciones.
Siemcalsa se encarga de poner en valor los yacimientos minerales ubicados en la Comunidad para atraer inversiones y favorecer la implantación de industrias que generen actividad económica y puestos de trabajo y, en consecuencia, contribuyan a fijar población en el medio rural. Como tarea complementaria, esta sociedad participada por la Junta promueve acciones para fomentar el conocimiento de nuestros recursos naturales.
En este cometido, encaja la iniciativa de difundir los centros de interpretación mineros, experiencia que ya se llevó a cabo en 2011, cuando se lanzó un primer díptico con información de las nueve instalaciones existentes entonces.
Esta nueva edición reseña la Mina Ceferina (El Hoyo de Pinares, Ávila), antigua explotación de cobre, plomo y zinc ubicada en las proximidades de la Cañada Real Leonesa; la Mina Esperanza (Olmos de Atapuerca, Burgos), de donde se extraía hierro; el Centro de Interpretación de las Salinas (Poza de la Sal, Burgos), edificio construido a finales del siglo XVIII por la Hacienda Real de Carlos III como sede de la Administración de las Reales Salinas; el Complejo Minero de Puras de Villafranca (Burgos), la única explotación minera de montaña de manganeso que permite visitas turísticas en Castilla y León; o el Museo del Petróleo (Sargentes de la Lora, Burgos), singular en España.
En la provincia de León, se ubican cuatro centros. El Museo Alto Bierzo, en Bembibre, alberga una de las muestras de minerales fósiles más importantes de la Comunidad, con un patrimonio de más de 5.500 muestras, de las que 700 están expuestas al público. La Casa del Parque del Monumento Natural de las Médulas, en Carucedo, ofrece una visión general, enriquecida con recursos audiovisuales, de este paisaje incluido en la Lista del Patrimonio Mundial en 1997.
El Pozo Julia constituye una de las minas con más tradición de la cuenca carbonífera de Fabero, que encuentra en ella su principal reclamo turístico. El Museo de la Siderurgia y de la Minería de Castilla y León, en Sabero, se localiza en la Ferrería de San Blas, primera industria siderúrgica moderna de España, que data de 1846, y está declarada Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento.
Carbón, oro, wolframio, estaño y piedra
En Barruelo de Santullán, Palencia, abre sus puertas con fines turísticos, pero también educativos, el Centro de Interpretación de la Minería, que recrea el yacimiento de carbón descubierto en 1838, fuente de riqueza para la cuenca del Rubagón.
Salamanca alberga el Centro de Interpretación de la Minería del Oro en El Cabaco. En el área conocida como Las Cavenes, los turistas pueden conocer los usos y valor histórico de los minerales auríferos o participar en talleres de iniciación a la arqueología o los de bateo de oro. La Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (Fecyt) ha seleccionado este programa didáctico para el fomento de la cultura científica, tecnológica y de la innovación.
Sin abandonar esta provincia, el Parque Temático del Granito en Los Santos se configura como un espacio al aire libre de 16 hectáreas en homenaje a este mineral, mientras Navasfrías permite al visitante adentrarse en antiguas galerías de wolframio y estaño. Por último, la cantera Las Cocinitas, en Villamayor, permite contemplar las técnicas de extracción de piedra arenisca, que dio forma y color a los monumentos de la vecina Salamanca.
La información contenida en los trípticos editados por Siemcalsa se completa con los Museos de la Piedra (Campaspero) y de Ciencias y Minerales (Cogeces del Monte), ambos en Valladolid.