El Plan se centra en actuaciones personalizadas de carácter integral dirigidas a personas con discapacidad y en exclusión o en riesgo de estarlo. El presupuesto previsto para todo el periodo será de 335,6 millones de euros y se estima que en todo este tiempo el conjunto de acciones de formación, orientación e inserción laboral podrán llegar a 109.000 personas. Ha sido elaborado con la implicación del Diálogo Social y de las entidades del Tercer Sector y la próxima semana se presentará en Gobierno Abierto para seguir mejorándolo con las aportaciones de toda la sociedad. Consta de cuatro ejes que desarrollarán más de 120 acciones. El primer eje se enfoca en conseguir la mejora de la empleabilidad de las personas más vulnerables y el segundo se centra en el acceso al empleo y mantenimiento del mismo. Los otros dos ejes tendrán un carácter instrumental y se dirigirán a mejorar la intervención de los profesionales sobre estas personas y a lograr un cambio social en la percepción de la inclusión social. La Red de Protección a las familias y la Estrategia Integrada de Empleo son los pilares en los que se fundamenta el Plan y herramientas esenciales para impulsar y desarrollar las actuaciones que contiene.
La Junta de Castilla y León ha presentado el Plan Autonómico de Inserción Socio-laboral en una jornada organizada en torno a este Plan que ha contado con la presencia de cerca de 300 asistentes, dos mesas redondas en las que han participado entidades del tercer sector, agentes económicos y sociales, empresas y Administración. La presentación del Plan ha corrido a cargo de la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Alicia García, y ha clausurado la jornada la Vicepresidenta de la Junta de Castilla y León, Rosa Valdeón.
Alicia García ha recordado que la situación de dificultad provocada por la crisis económica y social impulsó a la Junta de Castilla y León a crear en 2013 una red social de responsabilidad pública, la Red de Protección a las Familias afectadas por la crisis como instrumento de integración e interrelación de los recursos de la Comunidad para atender a las personas en situación de vulnerabilidad o riesgo de exclusión social. Junto a la Red, la Comunidad ha firmado con los agentes económicos y sociales en enero de 2016 la nueva Estrategia Integrada de Empleo, Formación Profesional, Prevención de Riesgos Laborales e Igualdad y Conciliación 2016-2020. De esta estrategia deriva un Plan de Empleo para el mismo periodo a lo que se suman otras dos recientes acciones, como son los acuerdos del Diálogo Social en materia de Renta Garantizada de Ciudadanía por un lado y para el desarrollo de la política de fomento del alquiler y la rehabilitación por otro.
La Red de Protección a las Familias atiende de media al año a 150.000 personas a través de 23 programas sociales y 300 agentes y colaboradores. En 2016 la previsión presupuestaria de la Red es de 180 millones de euros para atender a 180.000 personas. Desde su puesta en marcha en 2013, se ha incrementado el presupuesto de la Red en 40,4 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 29 %, y haber atendido a 41.000 personas más, lo que supone un aumento del 29,5 %. El servicio de distribución de alimentos está garantizando la provisión de productos de primera necesidad a 25.000 personas al año; las ayudas de emergencia social están beneficiando a casi 27.000 personas al año; el servicio integral de apoyo a las familias en riesgo de desahucio ha atendido desde su puesta en marcha a 4.372 familia, y la Renta Garantizada de Ciudadanía que ha beneficiado desde su inicio a más de 60.000 personas y, en 2016, incrementó su presupuesto un 25,5 % respecto a 2015, lo que supone un total de 69 millones de euros.
La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades se ha referido a que la Red de Protección a las Familias y la Estrategia Integrada de Empleo son los pilares en los que se fundamenta el Plan de Inserción Socio-laboral y herramientas esenciales para el impulso y desarrollo de las actuaciones que contiene. De esta forma, una vez que a través de la Red se atienden las necesidades básicas ahora el reto es el empleo, el empleo como fundamento básico de la igualdad de oportunidades y de la equidad social. Por eso este Plan se enfocará principalmente en mejorar la empleabilidad y el acceso al mercado laboral de las personas más vulnerables, una vez garantizadas con carácter previo la cobertura de las necesidades básicas de alimentación, vivienda o de cualquier otro tipo comprendidas en la Red de Protección.
¿A quién va dirigido el Plan?
El Plan de Inserción Socio-laboral va dirigido a personas con discapacidad y en exclusión o en riesgo de estarlo, como puede ser el caso de personas drogodependientes, inmigrantes, jóvenes provenientes del sistema de protección y reforma, minorías étnicas o mujeres víctimas de violencia de género.
Con este Plan se refuerza la acción protectora de las personas más vulnerables y también se mejora su inclusión social y laboral, con una atención integral de trabajo colaborativo en red y con una visión común de apostar por las personas más necesitadas. Además, pone en valor la inversión social y muestra a la sociedad los beneficios, en términos económicos, derivados del gasto social y de los retornos que genera, ya que se pretende cambiar la percepción social de esta inversión social.
Principales claves del Plan
En primer lugar, las actuaciones que contempla son personalizadas y se adaptarán a las diferentes circunstancias y perfiles de las personas. No todas las personas necesitan los mismos apoyos y, en este sentido, el Plan se apoya en el itinerario personalizado de inserción socio laboral que incluye actuaciones en función de la persona. Junto a esto, se potencia la figura del asistente personal para el empleo de las personas con discapacidad como figura que apoya esa inserción socio-laboral.
El Plan tiene un carácter integral. Contempla todos los aspectos de la inserción laboral en diferentes ámbitos y bajo una perspectiva global. Sus actuaciones fomentarán la contratación en empresas privadas, entidades sin ánimo de lucro, empleo protegido, autoempleo, creación de empresas y apoyo en la intermediación laboral.
Es un Plan participado, participativo y transversal. Cuenta con las entidades del tercer sector y las entidades locales para su desarrollo y toda la coordinación se dirigirá hacia un modelo con planificación de casos y procedimientos compartidos en todas sus fases. El plan ha sido elaborado con la participación e implicación del Dialogo Social y de las entidades del tercer sector que trabajan en el ámbito de la exclusión, como EAPN, Cruz Roja, Cáritas o CERMI. La semana que viene se presentara en Gobierno Abierto para poder seguir mejorándolo con las aportaciones de toda la sociedad y concluirá la fase de elaboración con su aprobación por parte del Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León.
Se trata de un Plan sustentado en la innovación social. Entre las medidas más innovadores se encuentran la de la figura del ‘gestor de contexto’ -entidad sin ánimo de lucro experta en servicios de proximidad y conocedora de las posibilidades del territorio que desarrolla líneas de negocio adaptadas a las capacidades de las personas- y programas innovadores que permitan conectar las preferencias personales con las necesidades del mercado para priorizar nichos de empleo.
Por último, el Plan pone en valor la integración social y laboral de las personas más vulnerables al apostar por un cambio en la percepción del gasto social en estos colectivos.
Estructura, contenidos y presupuesto del Plan de Inserción Socio-laboral
El Plan se estructura en cuatro ejes que desarrollará más de 120 actuaciones. El presupuesto estimado del Plan es de 335,6 millones de euros para el periodo 2016-2020, de los que 67,3 millones de euros están previstos en 2016. Se estima que el conjunto de acciones de formación, orientación e inserción laboral podrán llegar a 109.000 personas en todo el periodo de desarrollo del Plan.
Eje 1: Mejora de la empleabilidad de las personas más vulnerables
El objetivo general del primer eje es el de promover la inclusión social y evitar cualquier forma de discriminación en el acceso al empleo a través de acciones orientadas a la mejora de la empleabilidad y al apoyo de mercados laborales inclusivos. En definitiva, entrar en el mercado laboral, para lo que es necesario mejorar la empleabilidad de las personas vulnerables mediante itinerarios integrados de inserción con los que se les informe, asesore, forme, les permita realizar prácticas en empresas, se les de apoyo en la búsqueda laboral, entrenamiento para afrontar entrevistas de trabajo, etc.
De este objetivo general del primer eje derivan dos objetivos específicos. El primero de estos objetivos es el de mejorar la empleabilidad de las personas más vulnerables a través del desarrollo de itinerarios personalizados de carácter integrador y multidisciplinar. Todas las acciones enmarcadas en este objetivo irán dirigidas, por una parte, a la realización de itinerarios personalizados de inserción socio-laboral para personas más vulnerables y, por otro lado, al desarrollo y ejecución del programa de Orientación, Formación e Inserción Profesional, ‘OFI’.
El segundo de los objetivos específicos del primer eje es el de favorecer la inclusión activa con acciones específicas para personas en situación de especial vulnerabilidad que eviten la discriminación en el acceso y mantenimiento en el mercado laboral. Todas las acciones a desarrollar en este segundo objetivo irán dirigidas a la información, orientación y asesoramiento; desarrollo de competencias personales, motivación y habilidades sociales; acciones formativas; acciones formativas con empleo y apoyos complementarios a los itinerarios de inserción y a las acciones formativas.
En su desarrollo está prevista la implicación de 15 organismos y la evaluación de sus resultados se realizará a través de 15 indicadores.
Eje 2: Acceso al empleo y mantenimiento en el mercado laboral de personas en situación de riesgo o exclusión social
Si el primer eje tenía como objetivo que las personas puedan tener las condiciones necesarias para entrar al mercado laboral, el segundo eje se centra en el acceso al empleo y, una vez obtenido, en el mantenimiento del mismo desde la perspectiva de la inversión social.
De este objetivo general derivan dos objetivos más específicos. El primero de ellos es el de facilitar el empleo de las personas más vulnerables en el mercado laboral a través de entidades sin ánimo de lucro o empresas privadas mediante subvenciones o contratación pública. De esta forma, las acciones enmarcadas en este objetivo irán dirigidas a la contratación en la empresa privada, en las entidades sin ánimo de lucro, en el empleo protegido, en el autoempleo, en la creación de empresas y en el apoyo de la intermediación laboral.
El segundo de los objetivos específicos del segundo eje es el de impulsar la contratación en el sector público de personas con dificultades de acceso al mercado laboral por su situación de exclusión social. Todas las acciones a desarrollar en este segundo objetivo específico irán dirigidas al fomento del empleo local por parte de los municipios y al fomento del empleo por parte de la Administración Pública de la Comunidad.
En el desarrollo de estas acciones está prevista la implicación de al menos 12 organismos y también en este caso los resultados serán evaluados a través de 17 indicadores.
Eje 3: Desarrollo de instrumentos y medidas de capacitación y coordinación de profesionales y entidades para la inclusión socio-laboral
El objetivo general del tercer eje es el diseño de un modelo avanzado de intervención en materia de inclusión social apoyado en dos estrategias combinadas: la organización integrada de los servicios en un sistema de red y la atención intensiva, proactiva y preventiva a las personas en riesgo de exclusión.
De este objetivo general derivan cuatro objetivos específicos. El primero de ellos es el de establecer un modelo avanzado de atención en materia de inclusión social que mejore la calidad y el alcance de las intervenciones de los profesionales, dotándoles de competencias e instrumentos que les faciliten la toma de decisiones para conseguir la integración social y laboral de las personas en riesgo de exclusión.
Un segundo objetivo será el de desarrollar alianzas entre agentes públicos y privados para la atención integral a las personas en riesgo de exclusión, mediante modelos compartidos que unifiquen la metodología, los recursos y los conocimientos de los profesionales de las organizaciones implicadas.
El tercero de los objetivos específicos será el de utilizar un enfoque poblacional que permita actuar proactivamente con las personas, organizando la atención mediante un conjunto de estrategias diferenciadas que orienten la intervención y determinen la intensidad de la atención, los roles y servicios en cada caso concreto. Por último, el cuarto objetivo específico se enfocará en potenciar la puesta en marcha de proyectos innovadores y con enfoque integrado dirigidos a la inserción socio-laboral de grupos desfavorecidos que incluyan una dimensión de intercambio nacional y transnacional. En el desarrollo de estas acciones está prevista la implicación de la Junta, corporaciones locales y entidades del Tercer Sector, y los resultados serán evaluados a través de 16 indicadores.
Eje 4: Información y sensibilización sobre la inserción socio-laboral de las personas más vulnerables para el cambio social
Este eje tiene como cometido poner en valor la integración social y laboral de las personas más vulnerables. Los destinatarios serán las administraciones públicas, con especial consideración de las Corporaciones locales, el sector empresarial, los medios de comunicación y la Sociedad en su conjunto. Es preciso que se produzca un cambio en la percepción del gasto social en estos colectivos, como una inversión con un importante retorno social. Es una responsabilidad compartida contribuir a generar riqueza personal, social y económica en aras a una sociedad más justa, más equilibrada, más equitativa y más solidaria. Por este motivo el objetivo general de este cuarto eje es el de incrementar el conocimiento y la valoración positiva de la integración social y laboral de las personas vulnerables.
En este sentido, este eje contará con dos objetivos específicos: por un lado avanzar en el conocimiento por parte de la sociedad de las ventajas sociales y económicas de la incorporación al mercado laboral de personas en situación de vulnerabilidad y, por otro, impulsar que empresas, administraciones públicas y entidades del tercer sector dispongan de información suficiente que permita involucrarse en proyectos de inserción socio laboral de personas vulnerables. En el desarrollo de las acciones de este eje está prevista la implicación de al menos 11 organismos y los resultados serán evaluados a través de 6 indicadores.