El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y la subdelegada del Gobierno en León, María Teresa Mata, se han reunido esta tarde con los alcaldes de los ayuntamientos leoneses de Candín, Fabero, Páramo del Sil y Peranzanes, así como con los presidentes de las juntas vecinales afectados, para informarles del inicio y planificación de las labores de restauración de los terrenos afectados por el incendio intencionado y especialmente virulento producido este verano en Bárcena de la Abadía, que arrasó 2.665 hectáreas, la mayoría dentro de Red Natura 2000.
Las obras iniciales de emergencia para la restauración forestal y medioambiental en el área afectada por el incendio contemplan diez actuaciones urgentes: tratamientos de clareo, poda y resalveo de las especies más importantes, Prunus lusitanica y Quercus pyrenaica; la repoblación de 125 hectáreas de coníferas y frondosas; el control de la erosión y del agua, con la reposición de diques, limpieza de frezaderos y otras actuaciones; la adecuación de cauces mediante la construcción de zanjas y balsas de decantación de cenizas; el control de insectos perforadores; y la adecuación de pistas y señalizaciones.
Posteriormente está prevista otra serie de actuaciones para ejecutarse en los próximos años que incluyen la restauración de la cubierta vegetal, la adecuación de infraestructuras y la continuación de las obras iniciadas en esta primera fase de emergencia.
Así se lo ha trasladado el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, a los alcaldes de Fabero, Páramo del Sil, Peranzanes y Candín, con quienes se ha reunido esta tarde y a los presidentes de las juntas vecinales de Anllares del Sil; Argallo del Sil; Anllarinos del Sil; San Pedro Paradela; Lillo del Bierzo; Bárcena de la Abadía; Otero de Naraguantes; Villasumil; Lumeras; Cariseda; y Fresnedelo.
El presupuesto de las obras de emergencia, que ya han dado comienzo, es de 500.000 euros, financiados por el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA anterior MAGRAMA), y serán ejecutadas por la empresa Tragsa en un plazo de siete meses de conformidad con el proyecto elaborado por la Junta de Castilla y León y bajo la dirección de técnicos de esta. Tras esta primera fase de emergencia, seguirán los trabajos por parte de la Junta, que se prolongarán por varios años con una inversión que superará en los próximos tres años el millón de euros.
El incendio de Bárcena de la Abadía fue uno de los tres grandes incendios forestales producidos este verano, que arrasó 2.665 hectáreas, de los municipios de Fabero, 1.144 ha; Páramo del Sil, 844 ha; Peranzanes, 649 ha; y Candín, 26 ha, de las que la mayoría se encuentran dentro de la superficie calificada como Red Natura 2000, esto es, Zona de Especial Conservación y de Especial Protección para las Aves, y de ellas, más de 800 arboladas. Aunque afortunadamente no hubo que lamentar desgracias personales, sí movilizó un amplio dispositivo de 334 profesionales (ocho técnicos, once agentes medioambientales y celadores, siete cuadrillas de tierra, cinco cuadrillas helitransportadas, tres BRIF), nueve medios aéreos, siete buldócer, siete autobombas de la Junta, cuatro autobombas de los ayuntamientos de Fabero, Toreno, Villablino y Páramo del Sil, cuatro dotaciones de la UME y la colaboración de la Guardia Civil y de las Agrupaciones de Protección Civil Local. Ese mismo lunes 12 de septiembre también se registraron en la provincia de León un total de 14 incendios forestales, de los cuales diez fueron localizados en la comarca de El Bierzo, y en su conjunto la mayor parte de carácter intencionado. Ante estos hechos delictivos la Junta de Castilla y León desplazó un operativo autonómico que constó de 623 personas.
Recuperación de la fauna y flora silvestre
Las primeras actuaciones de restauración de terrenos afectados por un incendio forestal deben ir encaminadas a recuperar la funcionalidad del ecosistema forestal, el control de la erosión y la estabilidad de los terrenos, la mejora de la calidad de los recursos hídricos, la defensa de la masa forestal del riesgo de enfermedades y plagas, la recuperación de la fauna silvestre y de la flora autóctona y la protección de las infraestructuras de interés general.
Suárez-Quiñones ya se reunió la pasada semana con la alcaldesa de Fabero, Mari Paz Martínez, para coordinar las actuaciones que solucionen los problemas de abastecimiento de agua que sufre el municipio derivados también de las consecuencias del incendio, y para cuyas obras la Junta de Castilla y León invertirá en torno a un millón de euros.