La concejala de Familia y Servicios Sociales, Aurora Baza, ha explicado esta mañana cuáles serán las líneas de acción del I Plan Local para la Inclusión Social, aprobado el pasado 13 de enero por la Junta de Gobierno. Un plan que dará cobertura a parte de los 36.000 leoneses atendidos durante el pasado año por los Servicios Sociales del Ayuntamiento de León y que contribuirá a prevenir y reducir la pobreza y la exclusión social. Esta estrategia articulará las políticas sectoriales y territoriales que garanticen la prestación de los servicios para la inclusión en la ciudadanía. Un instrumento, que ha contado con el visto bueno de todos los partidos políticos con representación en el Ayuntamiento de León, que se crea para dar una respuesta amplia, unitaria y eficaz del conjunto de la ciudad, no sólo del Ayuntamiento.
La concejala de Familia y Servicios Sociales, Aurora Baza, ha presentado esta mañana el I Plan Local para la Inclusión Social 2017-20 aprobado hace diez días por la Junta de Gobierno. Una iniciativa, para los próximos tres ejercicios, que “contribuirá a prevenir y reducir la pobreza y la exclusión social con nuevos objetivos y estrategias”, como señalaba la concejala.
Esta iniciativa “de la Concejalía de Familia y Servicios Sociales, que obedece a unos valores definidos agrupados en los principios de liderazgo (una ciudad con un fuerte liderazgo y visión de futuro), proximidad (escuchar y reaccionar) y eficiencia (estrategia y colaboración entre entes públicos y privados), dará cobertura además a parte de los 36.000 leoneses que fueron atendidos por los Servicios Sociales del Ayuntamiento de León durante el pasado año”.
Para llevar a cabo estas directrices, la acción del Ayuntamiento y de las entidades del tercer sector debe guiarse por una visión integral y un enfoque transversal, tanto en el análisis de la situación, como en la identificación de personas y familias en riesgo y en las actuaciones concretas.
El Plan Local para la Inclusión Social de León 2017-2020 será el que articule las políticas sectoriales y territoriales que garanticen la prestación de los servicios para la inclusión en la ciudadanía. Se plantea, en este contexto, como el instrumento destacado para dar una respuesta amplia, unitaria y eficaz del conjunto de la ciudad (y no únicamente del Ayuntamiento) con la voluntad de desarrollar nuevos objetivos y líneas estratégicas innovadoras de cara al futuro así como actuaciones concretas y eficaces en el corto plazo para responder a las necesidades ciudadanas de forma inmediata. De esta forma, el Plan Local para la Inclusión Social es el principal instrumento municipal para trabajar por una ciudad inclusiva y cohesionada.
Aurora Baza y el técnico municipal Luis González, especializado en políticas de Inclusión Social, han explicado que para elaborar este Plan se ha realizado un diagnóstico previo a través de un análisis pormenorizado de la población, teniendo en cuenta “indicadores demográficos, indicadores económicos y laborales, urbanísticos y residenciales…”. González añadió que la principal meta ha sido “tener un paraguas que agrupe todos los recursos” con los que cuenta la ciudad para poder trabajar con ellos.
Este Plan perseguirá “objetivos creíbles, contrastables y evaluables”, enmarcados en los siguientes principios:
Integralidad: El Plan adopta un enfoque integral y coherente entre las partes y el todo, en el sentido de que su ejecución se rige por una visión global, independientemente de la particularidad de las medidas que se pongan en marcha. Constituye el marco estratégico a respetar por todos los agentes involucrados en su ejecución.
Individualización: La multiplicidad de factores que colocan a una persona en situación de exclusión hace necesario un tratamiento personalizado. En este sentido, el Plan individualizado de inserción será el mecanismo a través del cual se ofrezca una intervención ajustada a las necesidades concretas de cada persona, siguiendo la metodología del ‘Plan de caso’.
Empoderamiento: Las acciones incluidas en el Plan buscarán que la persona sea el principal agente de cambio fortaleciendo sus capacidades, confianza, visión y protagonismo, para impulsar cambios que faciliten abandonar sus situaciones de exclusión.
No discriminación: Debemos avanzar hacia una ciudad equitativa que priorice la igualdad de oportunidades y la justicia social. Una ciudad justa y cohesionada deber ser una ciudad que valore la diversidad en todos sus ámbitos y donde el conjunto de la población pueda participar en la creación de su proyecto común.
Prevención: Para avanzar hacia una sociedad inclusiva y cohesionada debemos hacer un esfuerzo en la prevención. El esfuerzo por erradicar situaciones de exclusión, debe tener como principio básico el fortalecimiento de los sistemas de detección precoz. Así, frente a los enfoques exclusivamente paliativos que han caracterizado tradicionalmente las acciones de lucha contra la exclusión, este Plan tiene un enfoque preventivo dirigido a identificar y neutralizar los factores de exclusión antes de que estos lleguen a materializarse.
Inserción: La inserción social y laboral de las personas en situación o riesgo de exclusión debe ser el fin último de las actuaciones recogidas en este Plan. Conseguir una inserción efectiva supondrá que las personas beneficiarias han logrado acceder de forma normalizada a los recursos de empleo, vivienda, educación, salud, etc.
Participación: Para su ejecución, se diseñarán entornos para facilitar la participación activa de las distintas áreas municipales y de todos los agentes implicados en los distintos procesos de inclusión social. Igualmente se establecerán los mecanismos para fomentar la participación ciudadana, y los mecanismos de comunicación y transparencia en el traslado de la información.
Flexibilidad: El Plan está sometido a un proceso continuo de adaptación a los cambios sociales y a las nuevas necesidades.
Calidad: Considerado como marco general de trabajo “hacer las cosas bien”, el Plan buscará ofrecer servicios y prestaciones de calidad en base a los siguientes criterios: eficacia, eficiencia, gestión por procesos, orientación a resultados y coordinación-trabajo en red.
Transversalidad: Entendiendo la exclusión como un fenómeno multidimensional, queda patente la necesidad de implicar al mayor número de agentes, departamentos, Concejalías y áreas municipales en los procesos de intervención.
Interdisciplinariedad: Este Plan asume que es necesaria la articulación y coordinación de las actuaciones desarrolladas desde las diferentes áreas profesionales relacionadas con la acción social para obtener los mejores resultados posibles y ofrecer un servicio integral y de calidad a los ciudadanos. Para ello se articularán, como unidad básica de intervención, el Equipo Multidisciplinar Específico de Intervención, que el área de inclusión social de denominará Equipo de Inclusión Social – E.D.I.S.
El Plan Local para la Inclusión Social se estructura en diferentes líneas estratégicas que pretenden ofrecer, desde la perspectiva municipal, y tanto en su conjunto como desde sus diferentes dimensiones, el enfoque y el método de que caracteriza la inclusión activa y las líneas marcadas por la Ley de Servicios Sociales de esta Comunidad en materia de inclusión social.
Las líneas estratégicas se concretan en unos objetivos generales que a su vez servirán de base para definir las actuaciones, las estructuras funcionales de gestión y todas aquellas herramientas e instrumentos necesarios que continuarán o se pondrán en marcha desde la aprobación del Plan.