Esta noche, en León, con nosotros, estuvo Ana Alcaide.
Increible y maravilloso el concierto de hoy. Ana nos deleitó con sus viejas y sus nuevas canciones. Canciones de ayer y de hoy, canciones basadas, como ella dijo, en viejas leyendas que narran la sabiduría popular. Leyendas de todos los lugares del mundo: de las Islas Horcadas, de Bulgaría…. Pero sobre todo, canciones de aquí y de aquellos que estuvieron aquí y que siguen aquí con sus pensamientos: los sefardíes.
Unas leyendas que comparten tragedias, que tratan de moralizar sobre los hechos y sobre la sociedad en las que nacen. Leyendas como la del Pozo Amargo de Toledo o la de la Mujer Muerta de Segovia. Leyendas que hablan de la marcha de los sefardíes y de cómo guardan sus llaves de su querida casa de aquí, como la Luna Sefardita.
Y un montón de otras composiciones, musicales unas, como Folía de la Primavera o Khun Caravan, cantadas otras, como la esposa Selkie (la eterna historia de mujeres-peces con humanos)…
Leyendas como el título de su último disco.
Ana Alcaide: Bióloga y con estudios de violín, en una estancia en Suecia descubre la viola de teclas, o como dicen por allá, la Nyckelharpa. Y decide aprender a tocarla y basar su música en su sonido evocador de músicas medievales. Y, basándose en su búsqueda de canciones tradicionales por una parte, y en su propia inventiva como compositora en otras, decide crear pequeñas obras de arte, no lo duden, que cuentan la vida medieval española y la vida sefardí de todos los tiempos.
Afincada en Toledo y, después de vivir en su barrio judío, ha decidido venir a visitarnos para que los leoneses podamos disfrutar, y de verdad que lo hemos hecho, con su voz y con sus composiciones.
Gracias, Ana.
Angel Lorenzana