Los apicultores podrán beneficiarse de subvenciones para luchar contra enfermedades de la colmena, la racionalización de la trashumancia, la repoblación de la cabaña apícola o para mejorar la calidad de los productos, entre otras. Además, tendrán prioridad en las ayudas los jóvenes y las mujeres.
La Consejería de Agricultura y Ganadería convocará ayudas para mejorar la producción y comercialización como recogerá la orden de bases que se publicará en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) el lunes. De este modo, los apicultores de la Comunidad podrán beneficiarse de seis líneas de subvenciones destinadas a recibir información y asistencia técnica; a luchar contra los agresores y enfermedades de la colmena, como la varroasis; a racionalizar la trashumancia; a medidas de apoyo para el análisis de la miel; a la repoblación de la cabaña apícola; y a mejorar la calidad de los productos apícolas con el objetivo de posicionarlos en el mercado a través de la diferenciación.
Los beneficiarios de estas ayudas serán apicultores que tengan, al menos, 150 colmenas, así como cooperativas apícolas y organizaciones representativas con personalidad jurídica propia, y los laboratorios que efectúen análisis de las características fisicoquímicas de la miel debidamente reconocidos. Además, se dará prioridad a los jóvenes y a las mujeres, con el objetivo de fomentar la incorporación al campo y fijar población en el medio rural.
Para recibir estas subvenciones, los beneficiarios deberán realizar la actividad apícola con anterioridad al 1 de enero de 2016, encontrarse al corriente de sus obligaciones tributarias, tener contratado un seguro de responsabilidad civil para desarrollar la actividad y realizar, al menos, un tratamiento frente a la varroasis en el periodo subvencionable.
La ayuda máxima puede llegar hasta el 100 % en el caso de solicitarla para información y asistencia técnica apícola, para luchar contra los agresores y enfermedades de la colmena y para mejorar la calidad de los productos apícolas; a un 90 % si es para apoyo para el análisis de la miel; y a un 80 % si es para racionalizar la trashumancia o para repoblación de la cabaña apícola.
La Consejería de Agricultura y Ganadería destinó en la campaña pasada más de 1,6 millones de euros a mejorar la producción y la comercialización de la miel, ayudas que llegaron a 280 apicultores, y próximamente publicará la orden de convocatoria con la cuantía para 2017, donde se fijará el plazo de presentación de solicitudes.