¡Vaya atracón!. Y que me perdone la diosa por la expresión, pero menudo festín se ha metido en apenas dos semanas. Con resaca liguera todavía, ayer, Cibeles se preparó para el postre final. El Real Madrid era campeón de Europa e iba a ir a visitarla. Ella sonrió, la gusta que la vayan a ver. Aunque con más demora por la espera hasta el día siguiente, no dejó de brillar, esperaba la llegada de sus discípulos. La plaza, abarrotada, esperaba una nueva coronación.
Y llegaron. Sobre las 21:00 el Real Madrid hacía aparición en Cibeles, previo paso por las autoridades como la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento.
Sonriendo, felices…Así llegaron los jugadores, no es para menos. Muchos de ellos aprovecharon para inmortalizar el momento con la Orejona. Hasta Zidane con el cuerpo técnico quiso posar para la foto.
Y fue ahí, cuando llegó el momento esperado. Ramos y Marcelo se encargaron de nuevo de vestir a la diosa Cibeles y homenajearla, darla cariño y más cariño.
Finalmente, Sergio Ramos se fue con la Copa de Europa. Despidiéndose, diciendo: «hasta pronto Cibeles»
Juan Lorenzana Prieto @juanlp91
Fotografías: Jeiser White @JeiserWhite