La Consejería de Agricultura y Ganadería, para cumplir con la normativa comunitaria y garantizar que los alimentos de origen vegetal que llegan al consumidor son sanos y seguros, va a llevar a cabo durante este año 17.376 inspecciones en materia de seguridad alimentaria y de sanidad vegetal
10 de agosto de 2017
Castilla y León | Consejería de Agricultura y Ganadería
La Consejería de Agricultura y Ganadería desarrolla una importante labor de control de los procesos y productos que se utilizan en el cultivo y elaboración de los productos vegetales. Además de desarrollar de forma eficaz el conjunto de reglamentos y directivas que conforman el nuevo marco normativo para la producción de alimentos y la seguridad alimentaria en la Unión Europea, Castilla y León cuenta con un adecuado sistema de inspecciones oficiales para la producción primaria agrícola cuyo objetivo es minimizar la utilización de sustancias nocivas en el sector agrícola. Este sistema se sustenta en inspecciones en campo y la ejecución de las analíticas establecidas por la normativa comunitaria.
Como consecuencia de la aplicación de la normativa comunitaria, se han incrementado el número de controles en el sistema regional lo que va a suponer que, en 2017, se harán 17.376 inspecciones en materia de seguridad alimentaria y de sanidad vegetal, con una cifra creciente de tomas de muestras cuyo número asciende a 15.408 y 19.173 análisis de laboratorio.
En Castilla y León, existen dos tipos de programas dentro del sistema regional: por una parte la ‘Estrategia regional de controles oficiales de la cadena alimentaria en la producción agrícola’ y, por otra, el ‘Plan regional de controles oficiales de sanidad vegetal’.
Controles oficiales de la cadena alimentaria en la producción agrícola
La ‘Estrategia regional de controles oficiales de la cadena alimentaria en la producción agrícola’ tiene como objetivo principal un adecuado sistema de inspecciones oficiales para vigilar la utilización y comercialización de productos fitosanitarios en el primer eslabón de la cadena alimentaria. Esto permite controlar todo el sistema y desarrollar mecanismos de respuesta rápida ante situaciones de emergencia.
Esta estrategia regional de controles en la cadena alimentaria incluye la ejecución de seis programas integrados cada año. El ‘Programa de vigilancia de la comercialización de productos fitosanitarios’ incluye la vigilancia de distintos aspectos como el etiquetado, la naturaleza, el contenido y el análisis de los productos fitosanitarios en los establecimientos donde se fabriquen, almacenen y comercialicen estos productos para lo que se controlan 188 establecimientos.
El ‘Programa de vigilancia de la utilización de productos fitosanitarios’ comprueba la utilización correcta de los productos fitosanitarios en las explotaciones agrarias y, para ello, la Consejería de Agricultura y Ganadería efectúa inspecciones en 491 explotaciones.
El ‘Programa de control de vigilancia de residuos de productos fitosanitarios en productos vegetales en origen’ permite controlar los residuos vigilando el límite máximo de restos de plaguicidas en los alimentos, para lo que se analizan 387 muestras de plantas, agua y suelos.
La verificación de 27 almacenes es parte del ‘Programa específico de control de la utilización de productos fitosanitarios no autorizados’ e intensifica los programas de vigilancia de la comercialización y uso de los productos no autorizados.
El ‘Programa de inspección de los contaminantes de alimentos’ tiene el objetivo de asegurar que se controlan las normas de higiene en la producción primaria de alimentos de origen vegetal, para lo que supervisa a 46 empresas alimentarias.
Y el sexto programa de la estrategia regional es el de ‘Control de las estaciones de inspección técnica de equipos de aplicación de productos fitosanitarios autorizadas y reconocidas en Castilla y León’, para lo que se verifica la actividad de 63 empresas.
Plan regional de controles oficiales de sanidad vegetal
El objetivo general de este plan es la realización de las inspecciones oficiales en materia de sanidad vegetal, fomentando la vigilancia de aquellas plagas o enfermedades y de otros agentes nocivos -tanto los ya implantados como los que puedan detectarse- que puedan afectar a los vegetales, productos vegetales u otros objetos. Esto permite la adopción de medidas y la toma de decisiones para su prevención, evitar su posible propagación y posibilitar su erradicación, cuando sea factible, de acuerdo con lo establecido en la normativa aplicable.
Todos los controles tienen por objeto asegurar al consumidor las mayores garantías de salubridad y seguridad de los alimentos producidos en las explotaciones agrícolas de Castilla y León y que su producción cumpla con los estándares de respeto al medio ambiente que marca la legislación vigente.