En esta ocasión, los controles se realizaron en dos puntos diferentes de la autovía A-6, (Madrid – La Coruña), a su paso por las localidades de Ponferrada y Astorga, formulando varias denuncias por exceso de velocidad, detectándose en los test de presencia de drogas en el organismo, y superar las tasas máximas de alcohol permitidas a los conductores.
La Guardia Civil formula denuncias a tres conductores profesionales, al arrojar en los test de detección la presencia de drogas en el organismo.
Efectivos de la Guardia Civil pertenecientes al Subsector de Tráfico de León, realizaron en la tarde del pasado domingo día 26, dos dispositivos complejos de control de vehículos y conductores en la autovía A-6, (Madrid – La Coruña), en puntos próximos a las localidades de Ponferrada y Astorga.
En estos dispositivos se realiza en un primer momento un control sobre la velocidad a la que circulan los vehículos, y preferentemente sobre los que circulan con exceso de velocidad, se requiere a sus conductores para que se sometan a las correspondientes pruebas de detección de alcohol y drogas.
Aunque este tipo de control va dirigido a todo tipo de vehículos y conductores, en esta ocasión los controles iban dirigidos de una manera específica a los conductores profesionales, es decir, a los que conducen vehículos destinados al transporte de personas y mercancías, (autobuses, camiones y furgonetas), ya que en los últimos tiempos se han dado casos de conductores de este tipo de vehículos que después de verse implicados en accidentes de circulación, se ha comprobado que conducían con presencia de drogas en el organismo, y / o superando las tasas máximas de alcohol permitidas.
En los controles practicados se obtuvieron los siguientes resultados:
En el dispositivo desarrollado en Ponferrada se detectaron 32 infracciones de exceso de velocidad, detectando otras 5 infracciones por otros motivos relacionados con la seguridad vial. Se realizaron 29 pruebas de detección de alcohol y 3 de drogas, arrojando todas ellas un resultado negativo.
En el dispositivo ubicado en Astorga, y dirigido de forma más específica a los conductores “profesionales”, se controlaron un total de 56 vehículos dedicados al transporte de viajeros y mercancías, realizando a todos sus conductores la correspondiente prueba de detección de alcohol, y a 18 de ellos también la de detección de drogas, arrojando como resultado 3 positivos en drogas, (2 conductores de camiones y 1 de furgoneta), y 1 positivo en alcohol que conducía un camión, además de 19 infracciones relacionadas con la Ley de Transportes Terrestres y 1 por otros motivos relacionados con la seguridad vial.
Conviene recordar, que conducir un vehículo con presencia de drogas en el organismo, puede suponer una sanción económica de 1.000 Euros, y la pérdida de 6 puntos del permiso de conducir.
La Guardia Civil intensificará este tipo de controles, especialmente los específicos a los conductores “profesionales”, debido a la preocupación que generan entre la sociedad el consumo de alcohol y drogas entre este tipo de conductores, por las más graves consecuencias de los accidentes en los que se ven involucrados el tipo de vehículos que conducen.
La velocidad inadecuada, según la valoración del agente en el momento del accidente, estuvo presente en el 9,5% de los accidentes con víctimas ocurridos en 2016 y este porcentaje se eleva al 17,2% cuando el accidente con víctimas sucede en vía interurbana. En el caso de los accidentes mortales se apreció que en un 21,5% de ellos la velocidad fue un factor concurrente en el accidente (Fuente DGT: Las principales cifras de la Siniestralidad Vial España 2016)