La Comisión Provincial de Estadística Agraria de la provincia de León, que celebró sesión esta mañana, ha revisado a la baja la estimación de los rendimientos de los cereales de invierno, situándolos en 436.946 toneladas. La revisión a la baja, que quizás no sea la última, está motivada por los efectos de las altas temperaturas de hasta 36 grados centígrados, así como por las pérdidas ocasionadas por las enfermedades que se han apoderado de los cultivos como consecuencia de las precipitaciones continuadas. Además, las tormentas del pasado martes y jueves, acompañadas de pedrisco, fuertes rachas de viento y lluvia, han causado daños por “encamado” que tendrán también sus consecuencias sobre los rendimientos.
ASAJA da por constatado que se han truncado las buenas expectativas que presentaba el cereal de invierno en León, particularmente el de regadío, y que las previsiones más optimistas se conforman con unos rendimientos en la media de los últimos diez años. La mayor producción en términos absolutos, de producirse, se deberá al incremento de la superficie de estos cultivos en detrimento de maíz y remolacha.
La superficie cultivada en la provincia asciende a 65.854 hectáreas de trigo, 19.778 de cebada, 19.141 de avena, 9.571 de centeno y 2.115 de triticale. De esta superficie total de 116.459 hectáreas de cereales, 39.999 hectáreas son de cultivo en regadío, representando el 34,34%, mientras que de secano se cultivan 76.460 hectáreas, representando el 65,66%.
ASAJA tiene como previsión de inicio de cosecha la semana que se inicia el 6 de julio, comenzando por la cebada y las leguminosas, para continuar ya a finales de mes con el triticale, centeno y trigo. Las últimas zonas en cosecharse son las de agricultura de regadío y las fincas situadas más al norte de la provincia.
Los precios no repuntan
Los precios de los cereales no repuntan en los mercados locales, nacionales e internacionales, a pesar de haber motivos para que lo hicieran. En la sesión de la Lonja de León del pasado miércoles el trigo cotizó a 174 euros la tonelada, la cebada a 165, el centeno a 164 y la avena a 144. Con estas cotizaciones y la estimación actual de cosecha, el valor de la producción ascendería a 73,5 millones de euros.