La XXIX Vuelta Ciclista a León-Gran Premio Diputación Provincial de León vivió otra de esas jornadas de ciclismo del bueno que este año se han convertido en la tónica general de una carrera que en su cuarta etapa salía de Bembibre y acababa en Molinaseca, en vísperas de la gran etapa de montaña que llevará al pelotón hasta La Baña, después de recorrer lo más duro de la comarca de la Cabrera.
Fue una etapa sin tregua de la que sale reforzado el líder, Óscar González Brea, que repitió victoria, esta vez con su ‘verdugo’ en la jornada anterior, Anatoli Budiak, a su espalda al cruzar la línea de llegada de Molinaseca. Los dos volvieron a demostrar que son los mejores, aunque estas dos últimas jornadas eran de dureza explosiva, nada que ver con lo que se puede vivir en la Cabrera, donde los escaladores uros, ésos que pueden atacar a 60 km de la meta, todavía tendrán muchas cosas que decir, con mención especial para el Lizarte y el Aldro, que con ras bazas para la general, serán los que pongan en jaque junto al Caja Rural al sólido equipo del líder, el Supermercados Froiz, que controló a la perfección la carrera y vio cómo su líder remataba la faena en los 6 km finales de la etapa.
Ese triunfo de Óscar González Brea fue lo que quedó en la retina, pero sería injusto quedarse sólo con eso en un ‘etapón’ que pronto se vio que iba a ser intenso como las jornadas anteriores. De salida estaba la dura subida a Onamio y la interminable a Foncebadón y los ciclistas lo aprovecharon para desatar muy pronto las hostilidades. Eduard Rodés fue el primero que tensó la cadena y en cabeza se quedaron apenas medio centenar de ciclistas, entre ellos el mejor leonés en la general, Jesús Nanclares, pero no Kevin Viñuela, que lo intentó todo para llegar a la meta volante de Santa Colomba de Somozas con opciones de pelear por los puntos, pero sin aguantar con los de cabeza en la parte final del puerto que separa el Bierzo de la Maragatería.
A partir de ahí fue un continuo intento de saltos en cabeza hasta que cuajó uno que dejó a cuatro ciclistas en fuga, con el Rías Baixas colocando a dos ciclistas, entre ellos a Angulo, que ya sabe lo que es ganar en León y que pareció capaz de repetir victoria cuando el cuarteto de escapados empezaba a bajar desde el alto de Manzanal a Bembibre con más de dos minutos de renta.
No iban a poder hacer nada porque el Supermercados Froiz trabajó a destajo y justo cuando se empezaba a subir por segunda vez a Onamio eran cazados los fugados. El líder atacó con fuerza y sólo Budiak se atrevió a seguirlo y cazó al ‘amarillo’ casi cuando llegaban a la cima. Los dos se lanzaron a tumba abierta hacia Molinaseca y en la recta de llegada Óscar González Brea demostró ser el mejor festejando la victoria ampliando su ventaja hasta los 23 segundos sobre Budiak y 35 sobre Óscar Linares, que es ahora el tercero.
Una renta interesante, pero no definitiva para el líder de la ronda leonesa porque esta quinta etapa no tendrá tregua ni en los primeros kilómetros desde San Cristóbal de la Polantera, de donde parte la etapa a las 14:30 horas hasta que se llega a Corporales y la carretera empieza a ponerse ‘cuesta arriba’. Desde entonces cuatro puertos puntuables y una decena más que no figuran en el libro de ruta para que los ciclistas se jueguen el triunfo final de la ronda leonesa, en la subida a las Gobernadas desde la que ya se da vista a La Baña.