La organización agraria ASAJA de León hace un llamamiento a los titulares de cotos de caza para que sopesen la conveniencia de retrasar el inicio de la media veda, que está fijado para el 15 de agosto. El motivo es evitar daños en los cultivos de invierno, sobre todo cereales, cuya recolección lleva un retraso de prácticamente un mes con respecto a un año normal. La práctica de la caza puede ocasionar daños importantes si los cazadores o los perros de caza se adentran en fincas no cosechadas.
ASAJA ha valorado pedir la modificación de la Orden que regula la campaña de caza para retrasar la apertura de la media veda, pero también ha creído que dicha media podría ser excesiva ocasionando perjuicios a un colectivo, el de los cazadores, con el que hay una buena convivencia. Hay que recordar que los agricultores están pidiendo la colaboración de los cazadores para reducir poblaciones cinegéticas que causan daños en el campo o en la ganadería, y el último ejemplo ha sido la plaga de conejos. ASAJA considera que la solución menos traumática es analizar la situación a nivel de cada coto y tomar las decisiones que compatibilicen los intereses de ambas partes. ASAJA entiende que allí donde no se haya cosechado al menos el 70 por ciento de las tierras sembradas debería de posponerse la apertura de la media veda, y que en todo caso se ha de hacer un llamamiento a todos los miembros del coto para que respeten los sembrados.
ASAJA recuerda que los propietarios de las fincas pueden reclamar al coto la totalidad de los daños que se ocasionen por las especies cinegéticas o por una mala práctica de la caza, que es el caso que en esta ocasión nos ocupa. Así lo establece el artículo 17 de la Ley de Caza, que añade que no se podrá practicar la caza sin la autorización escrita de los propietarios de los predios sin cosechar. En ese sentido, la organización agraria considera que los Agentes Medioambientales, en el uso de sus facultades, deben de velar para que se haga una buena práctica de caza impidiendo los daños a los agricultores, y que de no ser suficiente, es la Consejería de Fomento y Medio Ambiente la que debe de adoptar las medidas establecidas en la Ley.