El Consejo de Gobierno ha aprobado un gasto, por parte de la Consejería de Cultura y Turismo, de 1.011.915 euros para la contratación de obras de señalización turísticas. Concretamente, para la señalización de las rutas cicloturistas por la Ruta del Duero y por el sureste de la Comunidad, así como la adaptación de la señalización del Camino de Santiago Francés. Estas obras de señalización responden al objetivo de la Consejería de mejorar la calidad del destino turístico de Castilla y León.
La Ley de Turismo de Castilla y León establece que la Consejería de Cultura y Turismo establecerá una señalización turística homogénea que facilite la accesibilidad y el conocimiento de los diferentes recursos y destinos a los turistas en todo el territorio castellano y leonés, a través de un manual de señalización turística que deberá ser utilizado por todas las administraciones públicas de la Comunidad.
En este sentido, la Consejería está apostando por la señalización de los recursos más relevantes dentro de su ámbito territorial, y con ello mejorar la calidad del destino turístico de la Comunidad.
De esta manera, se llevarán a cabo las obras de señalización de la Ruta cicloturistica por la Ruta del Duero, con un presupuesto de 292.627 euros, y la Ruta cicloturistica por el sureste de la Comunidad, con un presupuesto de 306.520 euros, dentro del Plan de Señalización Turística de Castilla y León 2106-2019 y concretamente en el apartado de Turismo de Salud. El proyecto, incluye las obras necesarias para la fabricación y colocación de diferentes señales indicativas del trazado de la ruta por la que se pretende que circulen turistas en bicicleta, de acuerdo a lo especificado en el Manual de Señalización Turística de la Junta. El ámbito de las obras se ajusta a la señalización turística de la red de carreteras y caminos en el área de la influencia de la Ruta del Duero a su paso por Castilla y León, y en el caso de la Ruta por el sureste de la Comunidad, las obras se circunscriben a la señalización turística para la implantación en un trazado cicloturista, que une las capitales de provincia de Salamanca, Ávila, Segovia y Burgos, vertebrando el sureste de Castilla y León.
Las obras en ambas rutas consistirán en trabajos de fabricación y suministros de señales, así como la instalación de todos los elementos de señalización. En el proyecto de señalización se incluyen varios tipos de señales: la balizas direccionales, que están formadas por soportes de madera en los que se instalan las placas direccionales que permiten al ciclista el correcto recorrido del trazado, Paneles de localidad, formados por mesas informativas con planos de la localidad que se atraviesa y Paneles informativos, que en esta ocasión están formados por un tablero de madera con dibón informativo sobre dos postes verticales de madera. Se colocan en el comienzo y final de la ruta y en ellos se dan indicaciones del trazado y consejos para su recorrido.
Por otra parte, se realizará la adaptación de toda la señalización interurbana del Camino de Santiago Francés a las directrices de señalización aprobadas en el Consejo Jacobeo y de acuerdo también al Manual de Señalización Turística de la Junta. El proyecto, que tiene un presupuesto de 412.768 euros, se ajusta a la señalización que acompaña el trazado del Camino de Santiago Francés a su paso por Castilla y León, desde Redecilla del Camino en Burgos hasta salir por León a Galicia, afectando de esta manera a las provincias de Burgos, Palencia y León.
Los diseños de las señales se ha realizado conforme al Manual de Señalización Turística de la Comunidad y a las directrices para la señalización del Camino de Santiago aprobadas por el Consejo Jacobeo. Así, las obras consistirán en la fabricación y suministro de señales, eliminación de las señales que no cumplan con la normativa y la sustitución y nueva instalación de todos los elementos de señalización del trazado. En este proyecto de señalización se incluyen varios tipos de señales: las balizas direccionales verticales y horizontales, que están formadas por soportes de perfil metálico tubular en los que se instalan las placas direccionales sobre chapa de acero que permiten al peregrino el correcto recorrido del trazado, las señales de intersección o de tramos común de carreteras, que advierten del cruce de carreteras o del recorrido por la propia vía, los mojones de piedra o hormigón colocados cada 5 kilómetros de confirmación del recorrido y, los paneles informativos que estarán colocados en las bifurcaciones del trazado, para indicar las alternativas declaradas como Bien de Interés Cultural, que también son objeto de señalización.