León ha cerrado el mes de septiembre con un incremento de 36 personas inscritas en las oficinas del Servicio Público de Empleo hasta alcanzar los 29.190 desempleados totales en la provincia. Sin embargo, si tenemos en cuenta el cómputo anual, el número de parados desciende en 3.981 personas.
Se trata de un mal dato que acompaña a la tendencia nacional de aumento del paro coincidente con el fin de los contratos de la época estival. Los datos en la provincia demuestran que ese aumento del paro está asociado principalmente al sector servicios: 209 personas perdieron su empleo en el mes de septiembre en este sector.
Del mismo modo, la afiliación también ha registrado un descenso en la provincia de 61 personas respecto al mes anterior alcanzando los 159.811 afiliados. Aunque es León donde se registró un mayor aumento de la afiliación en términos interanuales (2,04%).
Fele considera que para establecer una positiva evolución de creación de empleo es necesario avanzar en medidas que estimulen la actividad económica, que ofrezcan un marco jurídico flexible, que favorezca la capacidad de adaptación de las empresas a los ciclos económicos y posibiliten la creación de empleo. Las empresas leonesas están realizando un gran esfuerzo por reducir los niveles de paro y se hace necesario dotarlas de medidas que faciliten su actividad, por ejemplo a través de la reducción de impuestos y cotizaciones.
Asimismo, Fele destaca que la situación existente en el país no contribuye a unas expectativas positivas puesto que la incertidumbre política, la inestabilidad económica, la parálisis renovadora o la caída del impulso reformista está provocando una desaceleración de la economía de forma alarmante. Se detecta además una parálisis en las inversiones generada fundamentalmente por esa incertidumbre, lo que provoca una desaceleración en el ritmo de creación de empleo y desarrollo económico.