El Consejo de Gobierno ha aprobado esta mañana la adhesión de la Comunidad al compartimento de Facilidad Financiera para el cuarto trimestre del año, un acuerdo que le permite acceder a un préstamo de 646,85 millones de euros en condiciones atractivas. La Junta dedicará estos recursos tanto a hacer frente a las necesidades de endeudamiento del periodo octubre-diciembre del presente ejercicio, como a cubrir una parte importante del déficit excedido del anterior. La cuantía total asignada a Castilla y León en 2018 con cargo a este mecanismo de financiación asciende a 1.599,37 millones.
El importe al que accederá la Administración autonómica para el cuarto trimestre de este año, que se eleva a 646,85 millones de euros, se desglosa en dos partidas. La primera, cifrada en 476,6 millones de euros, se destinará a satisfacer las amortizaciones de deuda que vencen entre octubre y diciembre (en torno a 400 millones de euros), la cuarta parte del déficit fijado para todo el ejercicio (58,9 millones) y la cuota trimestral correspondiente a la devolución de las liquidaciones negativas de 2008 y 2009 (cuantificada en 18,5 millones de euros). La segunda partida, de 170,25 millones, equivale al primer tramo del déficit excedido de 2017.
Esta operación de crédito mantendrá las mismas condiciones del contrato del 8 de marzo pasado para la formalización de un préstamo de 618,31 millones de euros, por el que se materializó la adhesión de la Comunidad a la Facilidad Financiera en el primer trimestre. En concreto, el plazo de devolución está fijado en 10 años, con dos de carencia y los ocho restantes de amortización. Asimismo, el tipo de interés aplicable será el equivalente al coste medio de la deuda del Estado a un plazo similar.
El compartimento Facilidad Financiera forma parte del Fondo de Financiación a las Comunidades Autónomas, creado mediante el Real Decreto-ley 17/2014, de medidas de sostenibilidad financiera de las comunidades autónomas y entidades locales y otras de carácter económico, para facilitar recursos a estas dos administraciones. A esta herramienta sólo pueden acudir aquéllas que hayan respetado los compromisos de estabilidad presupuestaria y deuda pública y el periodo medio de pago a proveedores. Conviene subrayar, además, que su uso carece de condicionalidad fiscal, es decir, que exime a la Junta de tener que elaborar un plan de ajuste.
Asignaciones trimestrales a las autonomías
La adhesión del Ejecutivo autonómico a la Facilidad Financiera para 2018 fue aprobada mediante Resolución de 26 de diciembre de 2017 de la Secretaría de Estado de Hacienda. A lo largo del ejercicio actual, la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos ha ido fijando la distribución trimestral de recursos entre las autonomías con cargo al Fondo de Financiación a comunidades autónomas.
Recientemente, ha efectuado la mencionada nueva asignación a Castilla y León por un importe de 646,85 millones de euros correspondientes tanto a las necesidades de endeudamiento del último trimestre de 2018, como al primer tramo del déficit excedido de 2017. Para que la Junta pueda acceder a estos fondos, es preciso que el Consejo de Gobierno adopte un acuerdo explícito de adhesión a la Facilidad Financiera, un trámite al que se ha dado cumplimiento esta mañana.
El Ejecutivo autonómico ha hecho uso de este compartimento en 2015 –cuando suscribió un préstamo de 2.053 millones de euros–, en el segundo semestre de 2017 –al formalizar 612,19 millones– y a lo largo de 2018 –periodo en el que recibirá un total de 1.599,37 millones de euros, una vez que se materialice la operación autorizada hoy–.
