El equipo de investigación capturó pares de agujeros negros supermasivos acercándose entre sí antes de unirse en un único y gigante agujero negro.
Un equipo de astrónomos ha podido observar por primera vez las etapas finales de fusión entre varios pares de galaxias.
Este es un evento que había sido teorizado pero no había sido verificado de manera directa hasta ahora.
El equipo dirigido por Michael Koss, científico investigador de Eureka Scientific Inc, examinó cientos de galaxias cercanas utilizando imágenes del Observatorio WM Keck en Hawai y el Telescopio Espacial Hubble de la NASA.
El equipo de investigación capturó pares de agujeros negros supermasivos, cada uno de ellos ocupando el centro de sus respectivas galaxias, acercándose entre sí antes de unirse en un único y gigante agujero negro, informó la NASA en un comunicado.
Uno de los eventos más violentos
En el centro de la mayoría (si no de todas) las galaxias se encuentran agujeros negros supermasivos con una masa miles de millones mayor que la del sol o de la Tierra.
El agujero negro supermasivo en el centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea, se llama Sagitario A* (Sgr A*) y tiene el peso de 4,3 millones de soles.
Las fusiones de galaxias eran más frecuentes en la etapa temprana del universo. Por lo tanto, estas imágenes proporcionan una rara visión de uno de los eventos más violentos del universo.
También presagian lo que probablemente sucederá cuando la Vía Láctea se fusione con la galaxia vecina Andrómeda.
Ambas galaxias contienen agujeros negros supermasivos en su centro, que eventualmente se estrellarán y se fusionarán en un agujero negro más grande.
Fusión galáctica
Una fusión de galaxias es un proceso lento que dura más de mil millones de años.
Bajo la inexorable fuerza de la gravedad, dos galaxias se van acercado lentamente hasta que finalmente se unen.
En su análisis, el equipo de Eureka Scientific Inc. confirmó que los agujeros negros de las galaxias crecen más rápido cuando se están aproximando a la colisión.
«El hecho de que los agujeros negros crecen cada vez más rápido a medida que avanza el proceso de fusión nos indica que estos encuentros entre galaxias son realmente importantes a la hora de entender cómo estos objetos llegaron a ser tan monstruosamente grandes», dijo la colaboradora del estudio Laura Blecha, de la Universidad de Florida, en el comunicado de la NASA.
El equipo se enfocó en galaxias ubicadas a un promedio de 330 millones de años luz de la Tierra, relativamente cerca en términos cósmicos.
Muchas de estas galaxias son similares en tamaño a las galaxias de la Vía Láctea y Andrómeda. En total, el equipo analizó 96 galaxias observadas con el telescopio Keck y 385 galaxias del archivo del Hubble.
La Vía Láctea se está acercando actualmente a la galaxia Andrómeda a una velocidad promedio de 300 kilómetros por segundo, por lo que en algún momento se fusionarán en una sola gran galaxia.
Pero no hace falta que te preocupes por esto ahora: los expertos predicen que la fusión no tendrá lugar hasta dentro de varios miles de millones de años.