El talento pesa más que el género: la persona asciende por méritos propios y por promoción interna
La compañía rompe con la brecha salarial, ya que hombres y mujeres cobran lo mismo en sus respectivas categorías profesionales
Afirmar que el sector de atención a las personas mayores y en situación de dependencia está fuertemente feminizado no es ninguna novedad. Pero sí lo es que las mujeres ocupen puestos directivos. El 82 % de las residencias del Grupo ORPEA en España están dirigido por mujeres. Además, existe paridad en el equipo directivo de la central, donde el 57 % son mujeres.
Los recursos humanos son el principal activo de los operadores del sector sociosanitario. De ahí la importancia de entender la igualdad como un factor estratégico y de competitividad, cuyo objetivo debe ser contratar al mejor profesional para desempeñar cada una de las labores profesionales, independientemente de si es hombre o mujer.
En este sentido, el director de Recursos Humanos, Alberto Crespo, subraya que todos y cada uno de los profesionales que trabajan en el Grupo ORPEA “han llegado a su puesto por méritos propios. Contamos con un gran equipo y por ello la promoción interna es nuestra primera y principal fuente de cobertura de vacantes. No elegimos en función del género, sino al mejor”. De esta manera, Crespo señala que, gracias al talento y valía de cada persona, “la plantilla de Grupo ORPEA está formada por un equipo mixto altamente cualificado. Además de no existir discriminación, también priorizamos los valores humanos de los profesionales”.
ORPEA rompe la brecha salarial
La desigualdad entre mujeres y hombres que existe en el actual mercado laboral se manifiesta también en las diferencias salariales entre ambos sexos. Sin embargo, Grupo ORPEA rompe con la brecha salarial, ya que hombres y mujeres cobran lo mismo en sus respectivas categorías profesionales.
Qué valora ORPEA de sus empleados
Como empresa que se dedica al cuidado de las personas mayores y/o con dependencia, la cultura empresarial de ORPEA se caracteriza por valores como la ética y el respeto a cada residente, su dignidad y sus deseos. En este sentido, exigen a sus empleados ciertas capacidades, habilidades y actitudes. Entre ellas, se encuentran las siguientes:
• Formación técnica en su especialidad. La calidad en la atención es uno de los pilares sobre el que se asientan los valores del grupo residencial. Y, para ello, es de vital importancia la formación de su personal. De hecho, para complementar la formación oficial, ORPEA apuesta por una promoción constante de formación interna, a través de sus “Cátedras ORPEA del Paciente Anciano”.
• Capacidad de trabajo en equipo. El alma de los centros ORPEA son sus equipos profesionales multidisciplinares, que trabajan coordinados para ofrecer una atención integral y personalizada al usuario. Pero, para ello, tiene que existir una coordinación constante, que requiere que los profesionales sepan trabajar de manera eficaz con otros compañeros.
• Empatía. La empatía es clave para muchas de las competencias de los empleados de ORPEA, tanto de cara al cuidado de los mayores como de los compañeros. Esto da lugar a un ambiente cálido que mejora el bienestar de las residentes.
• Compromiso y dedicación. Ambos valores denotan cierto grado de vocación, lo que favorece la motivación de los trabajadores, lo que puede traducirse en una mayor competencia en el desarrollo de sus funciones.
• Respeto y humanidad en el trato. Son fundamentales para una atención de calidad y con calidez. Son las pilares insustituibles para el cuidado a las personas mayores.
Fuente: ORPEA