La nueva convocatoria de jóvenes y modernización, que contará con 80 millones de euros, tendrá novedades como la simplificación del acceso a la ayuda reduciendo criterios de selección y la tramitación electrónica, reduciendo los costes administrativos y de gestión. Además, la convocatoria de ayudas a industrias agroalimentarias dispondrá de 40 millones de euros.
El Consejo de Gobierno ha aprobado un límite de gasto, para el ejercicio 2019, de 80 millones de euros para conceder subvenciones tanto a los jóvenes que se incorporen al sector agrario como a los que lleven a cabo la modernización y mejora de sus explotaciones.
Esta nueva convocatoria de ayudas contará con importantes novedades como la simplificación, tanto a nivel de exigencia en cuanto a las condiciones para el acceso a la ayuda como documental y de tramitación.
Así, respecto a la simplificación de las condiciones de acceso a la ayuda, se estudiará la posibilidad de reducir los criterios de selección al menos al 50 % y en cuanto a la simplificación documental y de tramitación, la Consejería de Agricultura y Ganadería continúa trabajando en la implementación de la tramitación electrónica a lo largo de toda la vida del expediente, para reducir los costes administrativos y de gestión, mejorando los procedimientos de tramitación y control.
En el caso de la medida de incorporación de jóvenes agricultores, el importe de la ayuda estará vinculado a los puntos obtenidos en los criterios de selección, teniendo en cuenta los gastos contemplados en el plan empresarial. El importe mínimo de ayuda es de 25.000 euros, que se incrementa en 1.500 euros por cada punto obtenido por encima del umbral mínimo establecido. El importe máximo de la ayuda se mantiene en 70.000 euros, pudiendo alcanzar hasta los 81.000 euros con las ayudas a jóvenes del primer pilar de la Política Agrícola Común (PAC).
Y respecto a la medida de apoyo a inversiones en explotaciones, la cuantía de la ayuda expresada en porcentaje del importe de la inversión auxiliable se establece en el 40 % en el caso de explotaciones que estén integradas en la Red Regional de Explotaciones de Castilla y León y en las que se realicen inversiones en modernización o puesta en marcha de nuevos regadíos. Este porcentaje además se incrementa cuando se trate de jóvenes que se instalen en la actividad; pertenencia a entidad asociativa agroalimentaria prioritaria de carácter regional; zonas con limitaciones naturales; e inversiones relacionadas con agroambiente y clima y agricultura ecológica.
Además, junto al instrumento financiero puesto en marcha recientemente para proporcionar avales a los agricultores y ganaderos que acometen proyectos de inversión en sus explotaciones agrarias, se está trabajando para ampliar este instrumento de garantías a los jóvenes que deseen poner en marcha nuevas explotaciones agrarias en Castilla y León.
En el último periodo de programación del Programa de Desarrollo Rural se ha duplicado el número de jóvenes incorporados, alcanzado los 900 de media por año, el doble que el periodo anterior, duplicándose, además, el número de mujeres jóvenes incorporadas, de 92 a 214 de media cada año.
40 millones de euros para apoyar a las industrias agroalimentarias
El Consejo de Gobierno ha aprobado, también, un límite de gasto de 40 millones de euros en subvenciones a fondo perdido para apoyar inversiones del sector industrial agroalimentario. Así, en la convocatoria de 2019 se destinarán 35,3 millones de euros a proyectos de inversión productiva, 3,1 millones de euros a ayudas en materia de I+D relativas a proyectos piloto y desarrollo de nuevos productos, prácticas, procesos y tecnologías, que se realicen mediante fórmulas de cooperación entre empresas y un millón de euros se destinará a ayudas a la inversión en la industria forestal.
Estos 40 millones de euros aprobados se suman a los más de 208 millones de euros de ayudas que la Consejería de Agricultura y Ganadería ha destinado al sector agroalimentario durante la presente Legislatura. Estas ayudas han permitido crear más de 3.100 nuevos puestos de trabajo.
Estas ayudas concedidas han tenido tres destinos fundamentales: incentivar la inversión productiva y creación de empleo en todos los subsectores agroalimentarios, como cárnico, lácteo, galletas, hortícolas y vinos, entre otros. Otra parte importante de las mismas se han dirigido a la promoción del vino en mercados de terceros países y un tercer destino ha sido impulsar la investigación, desarrollo e innovación. La Consejería de Agricultura y Ganadería recientemente habilitó otro apoyo al sector industrial agroalimentario con la puesta en marcha del Instrumento Financiero de Gestión Centralizada que permite facilitar la obtención de financiación de los proyectos aportando la Administración autonómica una garantía del 80% en una amplia oferta de préstamos que pueden ir hasta los 20 años de amortización (con un máximo de 4 años de carencia) y un importe máximo por proyecto de 5 millones de euros.