La clínica AGVP en Salamanca es pionera en implantar estas técnicas ya que está comprobado que reducen las molestias y las fobias, contribuyendo al bienestar psicológico del paciente y al éxito del tratamiento.
Adecuar las luces en función de las necesidades y crear un ambiente boreal mientras se realiza un blanqueamiento dental, hace que el paciente se sienta más relajado.
Impresión digital para evitar el engorro de las pastas tan desagradables para los pacientes o diseños de sonrisa por ordenador son algunas de las novedades que llegan a las consultas de los odontólogos.
Acudir al dentista se ha convertido en una experiencia sensorial positiva y todo para desterrar de una vez el miedo atávico que provocaba hasta hace poco esta visita. Algunas personas se sienten ansiosas o nerviosas por estas visitas, pero la odontología actual ha evolucionado mucho y prácticamente el cien por cien de los tratamientos son indoloros.
Técnicas como la aromaterapia, la realidad aumentada, la domótica o la realidad virtual han eliminado el estrés y el dolor en la consulta dental, reduciendo las molestias y las fobias y contribuyendo a mejorar la salud bucodental de la población.
La mayoría de los españoles nos acordamos del dentista como de Santa Bárbara, cuando truena, o, lo que es lo mismo, cuando ya es demasiado tarde y en ello tiene mucho que ver ese miedo al dolor. Lo ideal es realizar revisiones cada seis meses para evitar posteriores problemas, al igual que hacemos con otras especialidades médicas. Más un 50% de la población admite no cepillarse correctamente los dientes, sin embargo, una higiene diaria meticulosa es la base de una sonrisa saludable.
Bienestar psicológico
El bienestar psicológico del paciente es una condición esencial para el éxito del tratamiento dental y hoy las clínicas dentales hace uso de las nuevas tecnologías que nos rodean para poder ofrecer un tratamiento que produzca un menor estado de ansiedad.
“El objetivo es utilizar una gran cantidad de innovaciones tecnológicas para mejorar la satisfacción de los pacientes”, comenta el Dr. Juan Delgado, responsable de cirugía y estética dental de la Clínica AGVP y colaborador de Compromiso y Seguridad Dental. Así, la aromaterapia, un tratamiento terapéutico centrado en el uso de aceites naturales o esenciales que se extraen de las plantas, las flores, las hierbas o los árboles, permite al paciente evadirse, teniendo como objetivo mejorar la salud y el bienestar en general. “Es muy efectiva para aliviar algunas dolencias físicas o enfermedades y, a su vez, para levantar el ánimo y equilibrar nuestras emociones y por supuesto en el ámbito dental nos ayuda a evitar olores y sensaciones desagradables”, indica el Dr. Delgado.
Por su parte, las gafas de realidad aumentada ICNOS ayudan a reducir los índices de ansiedad al permitir al paciente tener el control de su comunicación con el dentista e, incluso, la posibilidad de realizar actividades durante la intervención, aportando un mayor conocimiento del tratamiento odontológico al paciente durante la intervención. Este puede navegar por las diversas opciones del software, ver videos, leer libros o visualizar las últimas novedades de Netflix, mientras el dentista realiza la intervención.
“Si durante el tratamiento -señala el especialista- el paciente siente la necesidad de comunicar algo al odontólogo, por ejemplo preguntar cuánto falta o si necesita una pausa, lo puede realizar a través de la app, conectada a un altavoz Bluetooth que emite mensajes predefinidos”.
La domótica, esta tecnología que se va haciendo un pequeño hueco en las consultas dentales ofreciendo a los pacientes una experiencia más relajante, permite adecuar las luces en función de las necesidades como, por ejemplo, crear un ambiente boreal mientras se realiza un blanqueamiento dental, para que el paciente se sienta más relajado.
Las novedades se extienden, sobre todo, al sillón del dentista con equipos y tratamientos totalmente innovadores. “Las engorrosas técnicas de toma de impresión, que realizábamos hace unos años, se han sustituido por una toma de impresión digital que evita el uso de las “pastas” que para los pacientes siempre han sido tan desagradables, por el mal sabor y la sensación de angustia que producían”, comenta el Dr. Juan Delgado.
Gracias a la toma de impresión digital y a las nuevas técnicas radiográficas, se pueden planificar los tratamientos de una manera mucho más precisa y predecible. “Podemos realizar diseños de sonrisa por ordenador y tener una aproximación del antes y el después del tratamiento antes de hacer nada en el paciente, también podemos planificar la posición tridimensional de un implante en el hueso e incluso podemos imprimir una férula quirúrgica mediante una impresora 3d con la posición que hemos preplanificado”, concluye el Dr. Delgado.
Fuente: CSD