UPL llevará el leonesismo por bandera a aquellas instituciones donde tenga representación. Así lo ha manifestado el candidato a las Cortes de Castilla y León, Luis Mariano Santos, quien asegura que seguirá garantizando que la Identidad Leonesa se respete en la próxima legislatura, y por eso la personalidad de la Región Leonesa será una de nuestras prioridades con medidas como:
Mantenimiento y promoción de las Juntas Vecinales.
Continuidad de la Cátedra de Estudios Leoneses.
Protección de la cultura tradicional y deportes autóctonos en nuestras comarcas.
Defensa y potenciación de la Lengua Leonesa.
Introducción en los libros de texto de referencias a la Historia del Reino de León y a los rasgos característicos de la Región Leonesa.
Y, sobre todo, reafirmar el derecho de la Región Leonesa (Salamanca, Zamora y León) a formar una comunidad autónoma propia.
“Seguiremos peleando cada día de los próximos cuatro años para poner freno al centralismo de la Administración autonómica, cuyas políticas ya sabemos a lo que conducen: despoblación, recesión económica y deslocalización industrial” ha afirmado Santos.
Todas estas medidas tendrán su lugar también en el Ayuntamiento de León, donde el candidato a la Alcaldía, Eduardo López Sendino pondrá en marcha medidas leonesistas que recoge su programa electoral en todas las áreas, y entre las que destacan. Centro dedicado a la cultura popular y tradiciones leonesas en el antiguo cine Abella Plan de formación sobre León, su cultura y su economía. Recuperación del Centro de Interpretación del Reino de León en el Palacio del Conde Luna. Plan Estratégico de Protección del Patrimonio Leonés. Organización de actividades tradicionales para niños mediante talleres participativos. Colaboración con asociaciones que promueven la protección de la cultura y las tradiciones leonesas para la difusión de las mismas. Organización de viajes formativos por la Región Leonesa para jóvenes, que lidere el Ayuntamiento de la ciudad.
El objetivo a medio y largo plazo es la autonomía de la Región Leonesa. Una parte de España que siempre (desde el 910 hasta 1982) tuvo reconocimiento y libertades dentro de las regiones españolas. Una personalidad política que forma parte de la identidad del Reino de León desde su fundación. Que hunde sus raíces en los Fueros medievales (los de León, Zamora, Salamanca, Ledesma), en los concejos centenarios de sus pueblos y en los Decreta de las Cortes de León de 1188 (la primera manifestación de Parlamentarismo en Europa Occidental) y refrendados en las Cortes de Benavente.
La autonomía actual ha roto esa trayectoria de una región que se gobernaba a sí misma con lealtad y solidaridad con los demás pueblos de España. En su lugar, zamoranos, salmantinos y leoneses sufrimos un ente que sólo atiende a los intereses de partes muy concretas de Castilla.
Una autonomía de la Región Leonesa atenderá mejor los problemas específicos de nuestras ciudades y comarcas; protegerá a nuestras empresas y trabajadores, porque conocemos sus necesidades; preservará el medio natural, porque nosotros amamos a nuestra tierra; entenderá las reivindicaciones la mujer leonesa, siempre pionera en el avance de las libertades; frenará la fuga de nuestros jóvenes, que se ven obligados a dejar nuestra región; y se proyectarán mejores infraestructuras, porque se tratarán de resolver, seriamente, nuestras carencias.