Al menos 356 policías locales -las cifras cambian constantemente- se han acogido a la jubilación anticipada a los 59 años en Castilla y León, desde que entró en vigor el decreto por el que se regula el coeficiente reductor de la edad, el pasado mes de enero, según datos de la Seguridad Social recabados por la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas.
En enero se acogieron a la jubilación anticipada 225 policías, en febrero 53, en marzo 23, en abril 3, en mayo 6 y en junio 3. CSIF prevé que, a finales de 2019, el número de policías locales de la Comunidad que se acojan a la jubilación anticipada puede ser de cerca de 600.
Tras las movilizaciones del colectivo de Policía Local, que culminaron con una gran manifestación en Madrid en 2018, el Gobierno y las diferentes fuerzas parlamentarias dieron visto bueno a la norma que establece un tipo de cotización adicional al colectivo de policía local, tal y como ocurre en el caso de la Policía Nacional y los bomberos.
En Castilla y León hay uno 2.500 policías locales, y según CSIF se están acogido a esta modalidad de jubilación la inmensa mayoría de los agentes que pueden hacerlo. CSIF, por tanto, se felicita por la gestión de esta medida que “con tanto esfuerzo se consiguió, gracias a las reivindicaciones de miles de policías en España que finalmente fueron escuchadas”.