Una ventaja de 33 segundos no es nada con lo que queda por delante en esta Vuelta Ciclista a León, pero son una ventaja para el cuarteto de ciclistas que llegó por delante a la meta de Boca de Huérgano, especialmente para Carlos García Pierna, que dio una exhibición cazando desde atrás a los fugados y Gerard Armillas, el vencedor de la etapa y nuevo líder de la XXX Vuelta Ciclista a León tras otra etapa frenética en la que se recorría toda la montaña central y que los ciclistas cubrieron a casi 40 km/h.
Fue otra jornada de un alto nivel de ciclismo. Una etapa sin tregua, muy rápida en sus inicios por las metas volantes que daban interés a los 50 primeros kilómetros de la etapa y que aprovechó el argentino del Rías Baixas, Julián Barrientos, para dejar sentenciada esa clasificación; y con una parte final muy atractiva, con un cuarteto de ciclistas en cabeza, el pelotón recortando por detrás su desventaja, y 12 km finales entre Portilla de la Reina y Boca de Huérgano que fueron una carrera de persecución en la que acabaron venciendo los escapados.
Habían sido el que a la postre iba a vencer en la etapa, el catalán Gerard Armillas, Samuel Blanco y dos corredores del equipo de la UCI, Petr Kelemen y Sergey Satovkin los que a casi un centenar de kilómetros de la meta se iban por delante. El pelotón tardo en reaccionar y cuando quiso hacerlo comprendieron que era mejor dejarles andar y medir los tiempos para cazarlos en Pandetrave. Los de cabeza lo aprovecharon para superar los cinco minutos de renta en la subida al alto de Tarna, donde el cuarteto se convirtió en trío al quedarse Keleman.
Entendiéndose a la perfección los escapados seguían manteniendo su renta en la suave ascensión a Parderrueda. Sólo camino de Posada de Valdeón empezaron a tensar la cuerda en el pelotón rebajando su desventaja hasta poco más de dos minutos. Era un momento complicado, pero los de cabeza no dejaron de colaborar con Armillas y Blanco rabajando más en las partes en las que la carretera miraba hacia el cielo y con el kazajo Satovkin confirmando lo bueno que apuntó en la recta final de la etapa anterior, mostrando que en sus piernas hay un ciclista importante que no tardará en llamar a las puertas de algún equipo profesional.
El pelotón no cazaba, pero quien sí lo hizo fue el madrileño del Kometa Carlos García Pierna que saltó del grupo y cazó a los tres fugados para presentarse los cuatro en la recta de meta de Boca de Huérgano en la que el mejor fue Armillas con sus tres compañeros de fuga en el mismo tiempo y el grupo del resto de aspirantes al triunfo final a 33 segundos, entre ellos el leonés Marcos González Cabero, noveno en la general provisional.
La cuarta jornada de la XXX Vuelta Ciclista a León comenzará al filo de las 15:00 horas en Toral de los Vados y llegará al Alto de Ancares tras superar 135 km de recorrido en el que los altos de montaña de Corullón y Lumeras servirán para abrir boca antes de la exigente ascensión final.