El delegado territorial de la Junta en León, Guillermo García, ha clausurado esta mañana estos tres cursos en los que se ha invertido más de 312.000 euros.
La Junta de Castilla y León, a través del Servicio Público de Empleo de la Comunidad, ha destinado 104.464,80 euros a cada programa mixto de formación y empleo centrado en la jardinería y la agricultura ecológica que se ha desarrollado en los ayuntamientos de Onzonilla, Chozas de Abajo y La Robla.
Durante nueve meses (del 1 de noviembre de 2018 al 31 de julio de 2019), los alumnos de estos programas han recibido, por una parte, formación de la especialidad y, por otro lado, han aplicado sus conocimientos de forma práctica. En cada uno de estas localidades se han formado ocho alumnos que se han dedicado a la realización de actividades de mantenimiento de zonas verdes en el municipio y el mantenimiento de platas en viveros y centros de jardinería. Para su aprendizaje y orientación han contado con una monitora de jardinería y agricultura ecológica y una coordinadora de formación complementaria y compensatoria en cada caso.
El delegado territorial de la Junta en León, Guillermo García, que ha estado acompañado por cada alcalde en dichos municipios, ha entregado los diplomas a los participantes que han recibido la formación. Además, el delegado les ha traslado su enhorabuena por haber completado de manera satisfactoria el programa del curso.
Tanto en Onzonilla como en La Robla es el segundo programa mixto de formación y empleo que se lleva a cabo desde 2004; pero en el caso de Chozas de Abajo es el quinto programa, con un nivel de inserción laboral que ha alcanzado el 75% en algunos casos. Además, en esta ocasión, dos alumnos han encontrado trabajo durante el desarrollo del proyecto.
En este sentido, el delegado territorial ha puesto de manifiesto que todas estas actuaciones permiten abrir el mercado laboral a personas desempleadas inscritas en el Servicio Público de Empleo. Los colectivos prioritarios a la hora de inscribirse en este tipo de cursos son: jóvenes menores de 35 años, preferentemente sin cualificación; mayores de 45 años, especialmente quienes carezcan de prestaciones y presenten cargas familiares; y parados de larga y muy larga duración, con especial atención a aquellos que han agotado sus prestaciones por desempleo y las personas en riesgo de exclusión social.