La Consejería de la Junta de Castilla y León ha hecho pública la nueva convocatoria de subvenciones cofinanciada al 50% por los Fondos FEDER. La ULE ya puede optar a ellas hasta el próximo 1 de junio.
La Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León ha hecho pública la nueva convocatoria de subvenciones del Programa de Apoyo a Proyectos de Investigación, dotada con 20 millones de euros para cuatro anualidades (2020, 2021, 2022 y 2023), a la que podrá acceder la Universidad de León (ULE) al igual que el resto de las universidades públicas y privadas de la Comunidad, los organismos públicos de investigación, las infraestructuras científico-técnicas singulares situadas en la autonomía, y las fundaciones de ámbito sanitario que tengan la investigación dentro de los fines y actividades de sus estatutos.
Este programa, cofinanciado al 50 por ciento por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional Feder, incluye la contratación de personal postdoctoral con el objetivo de generar conocimiento, desarrollar nuevas opciones terapéuticas y aplicaciones socio económicas, así como avanzar en investigación.
Esta línea de ayudas, que se podrán solicitar hasta el 1 de junio, se encuadra en la Estrategia Regional de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente de Castilla y León 2014-2020 (RIS3), en su período de actualización 2018-2020, y del Programa Operativo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional 2014-2020 de Castilla y León.
De acuerdo con el presupuesto total disponible, se podrán conceder subvenciones de 264.000 euros a 76 proyectos con la posibilidad de formalizar dos contratos postdoctorales, o bien 172.000 euros a 116 proyectos, con la posibilidad de formalizar un contrato postdoctoral, o también 80.000 euros a 250 proyectos, sin investigador contratado con cargo al proyecto.
Los proyectos deberán adecuarse a una o varias prioridades temáticas de la RIS3 y contar con algún tipo de colaboración empresarial o con otros agentes de desarrollo económico y social. Estas versan sobre agroalimentación y recursos naturales como catalizadores de la extensión de la innovación sobre el territorio; eficiencia productiva en sectores de transporte como automoción y aeronáutico, haciendo de materiales y componentes las claves de liderazgo y sostenibilidad; aplicación de conocimiento y tecnología en salud y en atención social, cambio demográfico y bienestar, para la mejora de la calidad de la vida de los ciudadanos; patrimonio natural, patrimonio cultural y lengua española, recursos endógenos base de la sostenibilidad territorial; e I+D en TIC, energía y sostenibilidad para la competitividad global regional en base a la transversalidad de tecnologías y conocimiento.