Con su participación en el reto ‘Urban Mobility Challenge’, el sindicato pretende fomentar entre su comunidad formas de transporte menos contaminantes y más sostenibles.
Comisiones Obreras de Castilla y León en una apuesta firme contra el cambio climático, ha confirmado su inscripción para participar en el reto ‘Urban Mobility Challenge’. Mediante dicho reto, organizado por la startup Ciclogreen, el sindicato pretende que la actividad sindical diaria se realice de forma más sostenible y respetuosa con el medioambiente en detrimento del uso excesivo del coche tanto para los trayectos in itinere como para los desplazamientos durante la jornada laboral.
El cambio climático constituye una de las mayores preocupaciones de nuestra sociedad en los últimos años. Nuestros hábitos de movilidad son uno de los principales factores que favorecen el aumento de la temperatura media de nuestro planeta. Según la Agencia Europea de Medio Ambiente, las emisiones provocadas por el transporte representan más de una cuarta parte de las emisiones totales de gases de efecto invernadero de la Unión Europea.
Dentro de esta cifra, el transporte por carretera –coches, camiones, autobuses, etc.- supone el 70% de estas emisiones, mientras que el resto pertenece al transporte marítimo y aéreo. Además, este sector, lejos de revertir la situación, es uno de los que ha visto cómo sus emisiones han crecido en los últimos años. Por ello, muchos expertos en movilidad advierten de la conveniencia de orientar nuestros hábitos de transporte hacia otros más sostenibles.
Es el caso de Jesús Freire, Director de Desarrollo de Negocio de la Federación Europea de Ciclistas, quien señala la necesidad de apostar por la movilidad sostenible en detrimento del uso irracional del coche. Freire asegura que, ante las crisis sanitaria y medioambiental que padecemos hoy en día, desplazarse en bicicleta o caminando son las mejores opciones. Considera que estos medios de transporte “pueden afrontar los retos de mantener la distancia social, luchar contra el sobrepeso y la obesidad y contribuir a que haya menos emisiones de gases contaminantes”.
El ‘Urban Mobility Challenge’, un reto sostenible para las empresas
Para reducir las emisiones derivadas del transporte y establecer hábitos sostenibles en los desplazamientos, es necesaria la colaboración de toda la sociedad. Las empresas, entidades y universidades tienen múltiples posibilidades para colaborar en este sentido. Entre ellas, destaca el reto ‘Urban Mobility Challenge’ y que lanza la startup Ciclogreen. Su CEO Gregorio Magno asegura que el objetivo de este reto no es otro que ayudar a las empresas y entidades participantes a que “puedan hacer un aporte en el cambio de hábito hacia el uso de medios de transporte más sostenibles dentro de su comunidad de empleados y estudiantes”.
CCOO Castilla y León ya ha confirmado su participación en la segunda edición de este reto, que se celebra del 16 de septiembre al 16 de octubre en el marco de la Semana Europea de la Movilidad. Dando ejemplo, en junio de este año, el sindicato aprobó su propio Plan de Movilidad Sostenible. La participación en este reto y la puesta en marcha de un programa propio de incentivos para el desarrollo de su actividad sindical diaria de forma sostenible son medidas incluidas en este plan. En el ‘Urban Mobility Challenge’ los empleados de las empresas y universidades participantes compiten por acumular un mayor número de kilómetros sostenibles recorridos. Por ello, se desincentiva el uso del coche individual a la vez que se fomentan otras formas de transporte pertenecientes a la movilidad sostenible, tales como caminar, utilizar la bicicleta, el patinete eléctrico, el transporte público o el coche compartido, entre otros.
En función de los kilómetros sostenibles recorridos por su comunidad, las organizaciones ocupan su puesto correspondiente en el ranking final. Según afirma Gregorio Magno, CEO de Ciclogreen, esta clasificación que se establece durante el ‘Urban Mobility Challenge’ se trata realmente de un “ranking de sostenibilidad y del compromiso que tienen estas empresas por lograr que sus empleados se desplacen de forma sostenible al trabajo con todos los beneficios que ello conlleva”.
De esta forma, el sindicato castellano y leonés se alinea con los objetivos y recomendaciones de la Unión Europea en cuanto a la reducción de emisiones de gases contaminantes. La medición de su Huella de Carbono es otra de las actuaciones emprendidas para luchar contra el cambio climático. Según Jesús Freire, el nuevo marco presupuestario europeo se basa «en la sostenibilidad, la lucha contra el cambio climático y contra esta crisis sanitaria».
En la edición de 2019 del ‘Urban Mobility Challenge’, participaron un total de 10.442 usuarios que ahorraron la emisión de 51.068 kilos de CO2 a la atmósfera gracias a los 204.291 kilómetros sostenibles recorridos.
El plazo para inscribirse en la edición de 2020 continúa abierto, tan solo hay que acceder a la página web, www.urbanmobilitychallenge.com, donde se encuentran todas las instrucciones para poder participar. Una vez dada de alta la organización, los empleados solo tienen que descargarse la app de Ciclogreen y desde ella registrar sus desplazamientos sostenibles. Por su parte, el responsable de la empresa o universidad tiene acceso a un panel de control desde el cuál puede comprobar cómo está funcionando el reto y también calcular las emisiones de CO2 que están evitando.