En 2020 se tramitaron 2.379 expedientes de vecinos de 161 municipios, de los que 1.397 fueron consultas y 982 reclamaciones que permitieron a los usuarios leoneses recuperar 82.939,27 euros
La Oficina Provincial de Consumo de la Diputación de León cumple 30 años al servicio de los consumidores y usuarios de la provincia de León mediante la atención de consultas y tramitación de reclamaciones, una labor que solo en el último año gestionaba 2.379 expedientes de vecinos de 161 municipios de la provincia, de los que 1.397 fueron de asesoramiento y 982 reclamaciones, que permitieron a los usuarios leoneses recuperar 82.939,27 euros.
Fue en enero de 1991, siendo Alberto Pérez Ruiz presidente de la institución provincial y con una sentencia del Tribunal Supremo que reconocía el derecho a indemnización a los afectados por el fraude del aceite de colza revolucionando el país, cuando se pone en marcha este servicio adscrito actualmente al área de Derechos Sociales que encabeza la diputada Carolina López Arias. A finales de la década de los ochenta habían empezado a surgir las oficinas de consumo en las grandes ciudades y este problema de índole sanitaria generó una enorme inquietud en la provincia de León, una las más afectadas, sobre todo en la zona rural, donde la sensación de desprotección era importante. En ese contexto, la Diputación leonesa reaccionó con gran rapidez sumándose muy pronto al número de instituciones que ofrecían este servicio a sus ciudadanos.
Como cada 15 de marzo, este lunes se celebra el Día Mundial de los Derechos del Consumidor, y la oficina provincial -con sede en León y Ponferrada y puntos de atención semanales en Bembibre y La Bañeza- aprovecha para hacer balance del ejercicio anterior, un año que estuvo marcado por la crisis del COVID, que ha dejado cambios tanto en la forma de trabajar como en las preocupaciones de los usuarios.
La suspensión obligada de la atención presencial no impedía a este servicio continuar con su labor. De hecho, la atención telefónica siempre ha sido uno de sus fuertes por la propia dinámica de funcionamiento de esta oficina que llega a los pueblos más recónditos de la provincia. Ya lo dice su lema: “Llevamos la Oficina de Consumo a su casa”. Disponibilidad y cercanía, dos cualidades que han permitido a este servicio seguir funcionando con relativa normalidad durante el estado de alarma para resolver las preocupaciones y problemas de los consumidores de la provincia, entre los que se ha detectado una mayor preocupación por las cancelaciones de reservas turísticas y viajes o los problemas derivados de la generalización de las compras por internet.
De este modo, el total de expedientes tramitados a lo largo de 2020 fue de 2.379: 1.397 consultas y 982 reclamaciones. De estas últimas, el 77% fueron objeto de mediación por parte de la Oficina Provincial de Consumo con resultado favorable casi en la mitad de los casos (360 reclamaciones de 759 en las que hubo mediación). Esto supone que los consumidores vieron devuelta la cantidad reclamada o satisfecha la indemnización económica solicitada en un plazo medio de 47 días, lo que supone una mejora de 16 días respecto al ejercicio anterior.
Las reclamaciones que no se resolvieron de forma positiva con la mediación fueron trasladadas a otra instancia siempre que esto era posible, o archivadas en los casos en que se consideró que no había base para respaldar la petición del consumidor o este renunció a continuar con la tramitación.
La labor de esta Oficina que más se vio afectada por la crisis sanitaria fue la de las charlas y exposiciones que cada año se programan a demanda de los ayuntamientos, juntas vecinales, asociaciones o colectivos sociales. Así, de las 135 solicitudes de charlas recibidas de 95 localidades distintas solo se pudieron llevar a cabo 25, mientras que las exposiciones quedaron limitadas a tres. En todo caso, este servicio ha hecho uso de los canales de comunicación telemáticos para mantener informada a la población de las novedades normativas y ofrecer consejo. El teléfono, el correo electrónico, los medios de comunicación, la página web o las redes sociales de la Diputación de León han contribuido a garantizar la disponibilidad y la cercanía de la que hace gala este servicio que suma tres décadas de trabajo.
El equipo del servicio de Consumo de la Diputación de León está formado por una jefa de Sección, María Rosario de Teresa; una técnica de Consumo, Elena Cimas; una oficial de Consumo, Ana Olga Cuevas, una jefa administrativa en la oficina de Ponferrada, Emilia García, y dos auxiliares administrativas, Eva Suárez y Verónica García.