Desde IU de León local explican que “La ciudadanía lleva oyendo a nuestras autoridades, desde hace mucho tiempo, que una de las apuestas para crear riqueza y empleo en la provincia y la Comunidad es el turismo. Sin embargo, no se cuida una de las mayores fuentes que tenemos de atracción: Nuestro patrimonio cultural y arquitectónico.”

En palabras de Juan Carlos Ponga, de la Asamblea de León de IU, “En esta tierra tan dependiente del turismo, que es León, no podemos vender el modelo de Sol y playa, por suerte o por desgracia. Eso se lo dejamos a los de la costa mediterránea. Por ello, lo único que podemos ofrecer a todo aquel que se acerque es estas tierras es o patrimonio histórico-artístico, patrimonio natural o patrimonio gastronómico. A pesar de las prédicas de los políticos, los ciudadanos no vemos ningún atisbo de preocupación por el cuidado de este bien tan importante para el desarrollo del turismo, en cualquiera de sus facetas.”

Carmen Franganillo, coordinadora local, manifiesta que “El abandono del patrimonio histórico-artístico en nuestra tierra es casi total. En la Comunidad solo se preocupan, desde 1989, de atender y ayudar económicamente a las exposiciones que hace la Iglesia, las Edades del Hombre o colaborando en la restauración de imágenes religiosas que en ellas se exhiben. El resto es pura calderilla. No se invierte en arqueología, tenemos numerosos yacimientos y excavaciones que, o son pagadas por los ayuntamientos y las diputaciones, o se quedan paradas o se mantienen con personas que trabajan por amor al arte, y nunca mejor dicho.”

En palabras de Ponga, “La conservación del patrimonio arquitectónico religioso se hace con la aportación de los vecinos y vecinas. Mientras, se consiente que la Iglesia ponga los bienes que levantaron, conservaron y mejoraron los habitantes del lugar a su nombre con la aquiescencia de las autoridades que, como dice Carlos Arniches en una de sus obras, son calabacines. El resto del patrimonio sigue, la mayor parte de él, en almoneda, se deja tirar, se modifica, se rompe… y así nos encontramos que, en obras tan emblemáticas como la Casa Botines de Antoni Gaudí, se dejó destrozar todo su interior, dejando sólo la cáscara, los muros exteriores y las dos cajas de escalera, además de algún detalle para justificarse. Nada queda de las viviendas que diseñó, ninguno de los detalles que había. ¿Dónde está todo lo que había en las viviendas del edificio? “

Víctor Bejega, arqueólogo y responsable de Patrimonio de la asamblea de León declara que «la legislación de Patrimonio actual resulta insuficiente y es urgente su modificación. La titularidad de joyas patrimoniales por parte de la Iglesia, mantenidas con dinero público y explotadas por el clero o la falta de control e inventarios sobre muchos de sus bienes patrimoniales son graves problemas. En otros países europeos, la titularidad patrimonial es pública y su gestión y control está mucho más avanzada».

Según Izquierda unida de León, existen numerosos ejemplos en la provincia, como el del palacio de Riolago de Babia, que se reconstruyó con esmero intentando recuperar la forma interior, la escalera, las estancias, y que la Junta de CyL, cuando se hizo cargo del mismo, permitió destrozar el interior para colocar una exposición que se podría haber ordenado conservando lo existente. Este hecho viene propiciado por el ladrillazo, que también tuvo sus nefastas consecuencias en este ámbito.

Para finalizar, Carmen Franganillo observa que “El abandono del patrimonio natural es patente cuando vemos todos los veranos los incendios de nuestros bosques, hecho que ocurre porque nadie se ha preocupado de ellos durante el invierno, ni se ha contratado personal suficiente para su mantenimiento, o las riadas de nuestros ríos en los que nadie hace nada por limpiar maleza y otros restos que luego provocan retenciones que inundan campos y casas. A día de hoy, esto es evidente en el Bernesga, a su paso por León, sin que las instituciones exijan a Confederación Hidrográfica del Duero el cumplimiento de su cometido. Además, el patrimonio gastronómico solo tiene atenciones cuando hay intereses particulares que se mezclan con lo político. Por eso, desde IU exigimos a la Junta, que tiene competencias transferidas, Diputación y Ayuntamientos de la comarca de León que se pongan a trabajar en un plan de recuperación y de mantenimiento del Patrimonio leonés, y al Gobierno Central, a modificar la Ley.