Desde Izquierda Unida apuestan por la integración de Historia y Patrimonio para articular una propuesta más completa, huyendo de “ocurrencias” que carecen de sentido museístico y didáctico, así como de un contexto que las acompañe.
La polémica suscitada por la instalación de monolitos en la calle Ordoño II a modo de “aula didáctica” sobre los reyes de León, sigue coleando. La asamblea local de Izquierda Unida León considera que se trata de “una apuesta muy poco acercada, que retoma la vieja apuesta de los monolitos en León, que ya vivieron su época con la malograda ruta romana jalonada de monolitos de mármol, carteles ilegibles, ladrillos romanos y huellas de caligae que hicieron las delicias de los amigos de lo ajeno”.
En palabras de Víctor Bejega, responsable de Patrimonio y Memoria Histórica de la formación, “abordar la Historia de la ciudad requiere una mayor profundidad, planificación y didáctica, creando aulas patrimoniales de verdad, dotándolas de recursos y apostando por la investigación histórico-arqueológica y por la difusión de esos conocimientos a través de publicaciones, conferencias y otros elementos. La instalación de monolitos con códigos QR en Ordoño, a modo de menhires o pilonos, sin un contexto definido, sin tener en cuenta las barreras arquitectónicas para personas con discapacidad, no es la mejor forma de divulgar nuestro pasado”.
En la misma línea, Carmen Franganillo, coordinadora local de IU, señala que “si bien suele centrarse la atención en las figuras regias de León, no menos importante es conocer los modos de vida y la microhistoria de la población que aquí residía. Profundizar en la composición social, las condiciones de vida, la distribución urbana y las actividades desarrolladas durante la Edad Media leonesa, no centrada únicamente en los reyes”.
En opinión de Víctor Bejega, “el discurso histórico de León debería convertirse en un unicum capaz de integrar Historia y Patrimonio, discurso y recursos desde la fundación de la ciudad hasta nuestros días. En el caso del Reino de León, recuperar y poner en valor espacios como el Castro Iudeorum, articular una propuesta divulgativa utilizando el propio callejero del casco histórico, recuperar espacios para la divulgación pública como el torreón de Doña Berenguela, dar a conocer los resultados de décadas de excavaciones arqueológicas del León medieval y un largo etcétera que, articulados a través de una propuesta didáctica y museística actualizada, resultan infinitamente mejores que la mera colocación de monolitos”.
Desde la asamblea de IU León mantienen su defensa del Patrimonio Histórico y Cultural como una apuesta de futuro fundamental para León, además de un nicho de empleo que aún está por desarrollar.