Las cuatro pasarelas peatonales instaladas sobre el río Torío presentan un estado de deterioro avanzado, muestra de que no han tenido ningún mantenimiento desde hace años. Se trata de cuatro puntos de acceso, dos de madera y dos metálicas que dan acceso a La Candamia, un parque natural del que muchos leoneses no sólo estamos orgullosos, sino que utilizamos con mucha frecuencia para todo tipo de actividades de recreo, desde organizar comidas familiares, hacer deporte o acceder a la margen izquierda del río Torío, para disfrutar de un paseo por un paraje natural magnífico, ha afirmado la concejala de Unión del Pueblo Leonés en el Ayuntamiento de León, Teresa Fernández.
Comenzando por la Pasarela de los Deseos, inaugurada en 1993, observamos que todas las maderas presentan grietas y desconches debido a la falta de un mantenimiento periódico, ya que la madera, por muy resistente que sea, con el paso del tiempo termina deteriorándose y adquiriendo un aspecto antiestético y deslucido, además de terminar por quebrarse. Podemos observar en ellas cómo algunos de sus tablones ya han tenido que ser sustituidos por otros nuevos que no guardan ni relación en tamaño con los anteriores, por lo que dejan huecos que incluso pueden hacer tropezar a los ciudadanos que atraviesan estas dos pasarelas. Consideramos que existen productos en el mercado, como los lasures a poro abierto, que impregnan la madera y la protegen. Aplicados periódicamente, evitarían su deterioro, lucirían un mejor aspecto y su durabilidad se incrementaría considerablemente. La siguiente pasarela, presenta el mismo aspecto en sus tablones de paso, pero, además, tenía un bonito acceso de postes con sogas y todas ellas aparecen cortadas o estropeadas. Sabemos que hay desaprensivos que deterioran el mobiliario público, pero también consideramos que hay que reponerlo para que las zonas de esparcimiento presenten un aspecto digno para los ciudadanos.
En cuanto a las pasarelas metálicas, la que da acceso al campo de fútbol de Puente Castro, tiene la mitad de su pintura desconchada desde hace años, por lo que sería conveniente un repintado urgente.
Finalmente, la última pasarela peatonal presenta los engarces de las barandillas metálicas tan oxidados y deteriorados en algunos puntos, que incluso se han agujereado en la zona de unión con el pavimento. Si se sigue dejando que aumente el deterioro de las mismas, puede ocurrir que llegue a desprenderse algún tramo de barandilla y causar alguna desgracia que no deseamos.
Por todo lo expuesto, solicitamos al Equipo de Gobierno que elabore un plan de mantenimiento periódico para evitar el deterioro de dichas pasarelas. Que se nutra la madera para evitar que siga aumentando su desgaste, que los ciudadanos se sientan seguros al cruzarlas y que presenten una imagen de cuidado y no de abandono como el que ahora presentan. León debe dar una imagen de ciudad cuidada y mantenida también en los espacios naturales de los que tenemos la suerte de disfrutar, aunque no se sitúen en el centro de la ciudad, concluyó Fernández.