Tras las quejas de los vendedores del Rastro de León ante el cierre sin preaviso de este domingo, IU quiere mostrar su solidaridad con las trabajadoras y trabajadores de los mercados de León.
Este domingo, y aduciendo causas de seguridad, el Ayuntamiento decidió cerrar el rastro pasadas las nueve de la mañana, sin aviso previo y cuando ya habían llegado los autónomos que se desplazaban desde otras comarcas para abrir sus puestos en León, y bajo amenazas de multa. El Ayuntamiento tampoco buscó soluciones al supuesto problema de seguridad, limpiando las calles, como sí hizo con las entradas a los centros comerciales de la ciudad que abrían ese día.
Carmen Franganillo, coordinadora local de IU explica que “estos trabajadores, 400 autónomos en total, ya vivieron durante la pandemia una situación de desprotección y de inequidad, puesto que el mercado se cerró durante diecisiete meses, algo que no sucedió en otros lugares, y más tratándose de una actividad que se desarrolla al aire libre. En ese momento trasladaron sus quejas al Ayuntamiento, que en ningún momento mostró empatía alguna con ellos. Este colectivo no ha recibido facilidades para realizar su actividad, pero el Ayuntamiento no se olvida de cobrar las tasas en ningún momento.”
Víctor Bejega quiere hacer hincapié en que “el Rastro recibe visitas de personas de fuera de León, y que en esta ocasión habían llegado dos autobuses de Asturias que habían parado en León para realizar una visita al mismo. Así que además, tiene una función dinamizadora de la ciudad. En estos momentos, además, el mercado de los miércoles y sábados está al 50 por ciento de su capacidad, a pesar de que se cobran las tasas íntegras, y sigue sufriendo restricciones, y el mercado de Colón tiene otra ubicación que no ha sido consensuada. El Consistorio se comprometió en agosto a flexibilizar las restricciones, pero hasta ahora no ha cumplido sus promesas.”
En cuanto al mercado de Colón, IU recalca que tampoco hubo consenso en su nueva ubicación, pidiendo los comerciantes una localización más cercana a Guzmán, lo cual no habría significado ningún problema. A pesar de ello, el Ayuntamiento se negó. Situación parecida a lo ocurrido con las vendedoras de productos no alimentarios de miércoles y sábados.
Para finalizar, desde IU de León local piden soluciones para las cuatrocientas familias que viven de esta actividad, y que el Ayuntamiento facilite su actividad y no realice agravios comparativos frente a otro tipo de comercios.