Los datos del paro correspondientes al cierre del año reflejan un descenso de 7.855 personas (-23,35%) en términos interanuales, hasta situar a la provincia en 25.791 parados. En términos intermensuales, apenas hay importantes variaciones, por sectores, destaca un mes más el descenso en el sector servicios con noventa y cinco personas desempleadas menos y el agrario con cuarenta y cinco. Por el contrario, el paro aumenta en construcción con ciento noventa y una personas y en industria con quince.
Por tanto, la notable reducción del paro experimentada en el último año no debe frenar la incorporación inmediata de medidas eficaces para la reactivación económica y el empleo. Como ya se advirtió desde la federación, nos encontramos en una situación de de incertidumbre marcada aun por la pandemia que lastra el crecimiento económico y, por tanto, la recuperación. Las empresas están soportando un importante incremento en los gastos fijos con una inflación desbocada, incremento de las bases de cotización y de las bajas laborales, etc que de no normalizarse en los próximos meses pondrá una vez más en peligro la viabilidad y supervivencia de las empresas.
Para este año 2022 que comienza, FELE insta a situar al sector privado en el centro de las políticas de apoyo e impulso de la actividad economica y el empleo, todo ello frente a políticas de incremento del gasto público o impuestos. Para hacer frente a esta recuperación, es necesario políticas de consenso en el marco del Diálogo Social que ofrezcan estabilidad y seguridad jurídica a los mercados, inversores y empresas.