Hoy, cuando estoy escribiendo estas líneas, es lunes 24 de abril. Hoy hace diez años que se inauguró el club de lectura “Río Órbigo” en Veguellina de Órbigo.
Desde entonces tanto Helena José García Fraile, la creadora de este hogar de los libros, como cada uno de los miembros que formamos el club de lectura, hemos formado una familia de palabras, de sentimientos y de hechos. Entre todos hemos conseguido interpretar los libros que hemos leído. También interpretarnos entre nosotros mismos para apoyarnos y socializar en un espacio donde el lenguaje produce tan beneficiosos resultados.
En este capítulo de “El hogar de la vida”, me voy a trasladar al 3.023, madre Naturaleza, que es el hogar donde se desarrollan las vidas de todos los seres, ya consiente que los humanos vayan poblando la superficie de Tierra. Y ahí quiero llegar, como no soy adivina, por suerte, supongo que en el cuarto milenio, seguirán existiendo los clubes de lectura, ojalá sea así, ya que pertenecer a un club de lectura te hace más sabio, puesto que al compartir la opinión de un libro con todos los miembros pertenecientes al club, estás compartiendo vida, vida interior, del libro y la tuya propia con los demás. También descubres que tus compañeros de lectura, han descubierto cosas en el mismo libro que a ti se te habían pasado prácticamente de largo, o descubres otras interpretaciones magníficas del mismo libro. Pertenecer a un club de lectura, cuanto menos te hace entender y entenderte mejor con los otros.
Neuronada: Hoy este tramo del texto se lo quiero dedicar a Helena José García Fraile, nuestra bibliotecaria y reitero, la creadora hace diez años del club de lectura “Río Órbigo”. Helena se ha preocupado de contactar con autores de libros, con los que hemos podido dialogar y sentir el proceso de su creación. Helena también ha conseguido amigar opiniones contrapuestas y nos ha contagiado su respeto para escucharnos todos. Felicidades Helena por estos diez años, a por otros diez con esta misma empatía que has logrado en ese hogar que es la biblioteca. ¡Gracias!
Para todos mis amigos y compañeros del club de lectura “Río Órbigo” un abrazo lleno de brazos de gratitud. La verdad es que lo hemos pasado chupi canela, y también hemos tenido nuestras contraopiniones, que nos hacen más plurales y más resilientes con los demás. A todos gracias por sus enseñanzas y por compartir en esa casa de libros, amistad, compañerismo, sabiduría, risas, civismo, educación y cariño. ¡Feliz cumpleaños a todos!
Manuela Bodas Puente – Veguellina de Órbigo.