Las sanciones económicas que recoge la legislación de caza de la región para este tipo de actos van de los 2.000 a los 10.000 euros.
En el municipio de Masueco, en Salamanca, el pasado domingo 21 de enero se celebró una batida de jabalíes debidamente autorizada y señalizada que no tuvo el final que los cazadores imaginaban.
Decenas de senderistas comenzaron a colarse en la mancha tan solo media hora después de que los cazadores llegaran a sus puestos. A pesar de que estos últimos les advirtieron del peligro que eso podía suponerles, continuaron pasando e incluso circulando con sus coches.
Uno de los participantes, al ver que la situación no iba a parar, dio aviso a la organización de que estaban pasando sin ningún tipo de problema, con el riesgo que podía suponer para su integridad física.
Las sanciones a las que podrían enfrentarse los senderistas van de los 2.000 a los 10.000 euros.
Los senderistas se estarían dirigiendo al Pozo de los Humos, un salto de agua situado en el curso del río las Uces a su paso por el término municipal de Masueco y que en los últimos días está recibiendo numerosas visitas debido a las últimas lluvias.
Las denuncias en este tipo de casos pueden llegar, como dijimos a los 10.000 euros, según establece la Ley 4/2021, de 1 de julio, de Caza y de Gestión Sostenible de los Recursos Cinegéticos de Castilla y León. En su artículo 84, el cual recoge las infracciones graves, consta el hecho de «impedir u obstaculizar el normal desarrollo de una acción o modalidad de caza o de controles poblacionales autorizados».
Asimismo, su artículo 91 hace referencia a las sanciones correspondientes en función del tipo de infracciones tipificadas en dicha ley.
Esto no es más que una cuestión de convivencia. Se dan batidas en esta zona uno o dos días al año, el resto de los días no hay ningún peligro para caminar por la zona. Utilicemos esos días para el senderismo. Hay monte para todos.