Cuántos jamás, fueron siempre; / cuántos nunca, se han vencido; / cuánto milagro acontece, / cuántos muros han caído. / Cuántos desiertos florecen, / cuánto infierno se hace frío. / ¿Por qué resulta imposible / que la sed que hay en tus labios / venga a morir en los míos?
En las tardes de los segundos viernes de cada mes, el Varsovia en León, se convierte en un barco lleno de letras donde se sirven menús tan variados como suculentos. El barco se llama Cuento Cuentos Contigo y el capitán de este trasatlántico de palabras es Marcelo Óscar Barrientos Tettamanti, el autor de los versos que preceden a este párrafo.
En este barco navegan cuentos y relatos llenos de historias, unas veces intrépidas, otras con calma y verbo a favor. Navegan recuerdos escondidos en las bodegas que abastecen los sueños. En la sala de máquinas de este barco, se encuentra un hacedor de historias gráficas, que con su cámara inmortaliza los sueños, los recuerdos, los hablares, los decires, y los instantes que marcan las rutas del viaje. No es otro que Alejandro Ayer Romero (Nemonio) que carga y recarga la magia del viernes en sus fotografías, verdaderos poemas de imágenes.
Este precioso barco, donde viajan creadores de vidas paralelas o de recuerdos envueltos en la neblina de la imaginación, es el marco incomparable para tomarte trocitos de vida en pequeños sorbos sin que se te atragante la realidad cotidiana, que suele ser el pan duro de cada día. Sí, estos curruscos de creatividad, vienen a hornear una hermosa hogaza llena de migas, de cortezas y también, porqué no, de maravillosas tardes donde aprender es siempre, ya que siempre se aprende mucho escuchando la magia que otros han puesto en sus palabras, en sus frases, en sus cuentos y en su forma de decir.
Lamiguería: Hoy, recogiendo las migas del mantel de los recuerdos, quiero agradecer a la creadora de este gran edificio que es Cuento Cuentos Contigo, este precioso proyecto. Cuento Cuentos Contigo dio una hermosa recopilación allá por el 2016, titulada “Historias para hacer historias” con prólogo del contador y poeta Toño Morala, al que añoramos con la mano en el corazón. La creadora fue Flor Méndez Villagrá, que después dejó el timón en las mejores manos, en las de Marcelo O. Barrientos Tettamanti para dirigir cada segundo viernes de mes, las estupendas travesías de letras, o bajar al fondo de la creatividad para hacer inmersiones llenas de corales donde observar las neuronas del alma.
Acércate a Cuento Cuentos Contigo, probarás un pan de vida que te reconfortará la víscera de la comprensión.
Manuela Bodas Puente – Veguellina de Órbigo.
