Los resultados de la Encuesta de Población Activa (EPA) que ha publicado hoy el INE relativos al tercer trimestre del año arrojan malas perspectivas para la provincia de León en materia de empleo ya que el paro repuntó en 3.400 personas entre abril y junio, respecto al trimestre anterior, alcanzándose la cifra de 20.100 desempleados, casi el 11% de la población activa.
Se trata del mayor incremento del paro de toda la Comunidad, de más del 20% respecto al trimestre anterior, cuando en el conjunto de Castilla y León el paró se redujo un 3,75%.
Con estos datos, la tasa de paro de la provincia sube hasta el 10,58%, por encima de la media autonómica del 9,81% y por debajo de la nacional situada en el 11,27%.
León vuelve a ser un caso singular y preocupante en el panorama nacional, ya que los datos que arroja la EPA contrastan con el comportamiento especialmente positivo del mercado laboral en el conjunto de España donde se alcanzaron niveles máximos de ocupación, población activa y trabajadores en el sector privado.
De hecho, León vuelve a estar en el vagón de cola en cuanto a tasa de actividad que ha bajado al 48,5% cuando hace un año habíamos logrado subirla hasta el 51,11%.
La ocupación arroja mejores datos, aunque no compensen la pérdida de empleos, con 500 personas más ocupadas, llegando a las 170.000 frente a las 169.500 del trimestre anterior, pero lejos de los 181.500 ocupados en la provincia que teníamos hace un año.
Si tenemos en cuenta que el segundo trimestre del año es uno de los mejores para el mercado laboral, los datos de la EPA no corroboran esa premisa y añaden elementos de preocupación e incertidumbre respecto a la fortaleza de la recuperación económica.
Para recuperar el dinamismo del sector privado es importante superar la parálisis política y mejorar el clima de negocio que cada vez es más nocivo y merma la competitividad de las empresas, no sólo por el aumento de los costes laborales sino también por la proliferación de normas y exigencias regulatorias que van creando la sensación de inseguridad jurídica, lo que se traslada a los planes de inversión y contratación, como estamos observando.
En provincias como León es urgente que se apliquen políticas transversales y un plan de choque con inversiones reales que sean capaces de revertir el grave problema demográfico y de pérdida de talento joven y no tan joven que atenaza nuestro desarrollo y progreso económico y social.