Pilar López Duque nacida en León con una fuerte inclinación al dibujo y la pintura, tras un largo periodo realista, comienza su trayectoria como pintora abstracta en junio del 2021. No renuncia nunca a la pintura figurativa porque siente pasión por el dibujo. Trabaja desde el estudio y la observación, elabora a nivel conceptual a partir de ahí surge la imagen, los colores, las texturas. Su obra quiere abrir espacios para la experiencia del equilibrio y la serenidad. Tolstoi decía que el arte es uno de los medios de comunicación entre los hombres. Ella busca transmitir armonía.
El tema principal de esta obra es la pequeña bailarina de Degas. Mostrada al público por primera vez en la Exposición impresionista de 1881 dentro de una urna de cristal. De la pequeña bailarina todo me inspira: su postura en cualquier ángulo, su vestido, las desgastadas zapatillas, su lazada aunque aquí sólo se intuya, y sobre todo su gesto con un gran peso en la mirada: pensativa y atenta.
Es una pintura que me transporta a un ambiente sereno, la atmósfera envuelve a la figura sin quitarle protagonismo porque ella es la intención de la obra. Seguramente no será la última vez que sea pintada por mí. Aunque las fuentes difieren del número de reproducciones que existen, se cree que son 28 las repeticiones en bronce de Marie van Goethem. Tengo una cita pendiente con ella para visitarla personalmente en alguno de los museos o galerías donde se exhibe.
La obra permanecerá expuesta durante dos semanas en el Camarote Madrid.
