
Parece el tiempo no pasar, / pero la vida escapa. / Todo ocurre entre el cristal / y la cortina. / A distancia del ojo / la emoción se vende cara. / Inesperadamente, un insecto, / una gota de agua golpea la ventana, / en una eternidad late el corazón / hasta que, otra vez, / en un rayo, vuelve a reinar / la inercia.
El párrafo anterior lo constituye un poema muy bien horneado en la tahona que Marcelo Tettamanti, ha llamado “Querencia Recíproca”. Aparece en la página 65 y nos muestra su talento para sacarle brillo a un espacio como el que conforman el cristal y la cortina.
El pasado sábado, en la biblioteca “Río Órbigo”, tuvo lugar la presentación de este poemario que deja en nosotros, cuando lo masticamos como si fueran migas del mejor pan, ese sabor a la corteza tierna de un pan que sabe a abuela. Lo de abuela, viene a cuento porque Marcelo estuvo acompañado en la presentación por Isamil9, una poeta, cantautora y especialista en hacer vibrar con su pasión y su voz al público, no, no es que Isa sea abuela, es que Isa en una de sus grabaciones, dedica un poema, escrito y musicado por ella, a sus abuelas. Isa además, ha escrito el prólogo del poemario, en el que podemos apreciar lo buena que es con las palabras.
Dice Isamil9 para finalizar el prólogo de “Querencia Recíproca”: “Posdata: Si finalmente decides entrar en su querencia, seguramente nos veamos, espero no te importe encontrarme. Yo sigo yendo a menudo porque ¿quién querría alejarse del amor?”
Totalmente de acuerdo Isa, este pan de días que nos ha amasado Marcelo, sabe a tierra, a raíz, a amor, correspondido o no, es decir, sabe a vida. Sabe a la buena sintonía que el autor tiene en la rutina, por cierto Marcelo es un poeta también con su cámara.
En estos momentos convulsos, aunque para convulsos, los que tuvieron nuestros padres y abuelos, en estos momentos indefinidos que vivimos, digo, pasar la tarde en una biblioteca, mojándonos con las canciones de Isamil9 y con los poemas de Marcelo Tettamanti, es muy bueno. Nos pudimos haber calado hasta los huesos e igual pillamos una pulmonía de calma, respeto, y empatía, que no hay antibiótico físico que nos la quite, pero la buena onda que se respiraba en la biblioteca nos contagió a todos. ¡Bravo por Marcelo y por Isamil9!
Lamiguería: Hubo otro artista con la cámara, que la hace hablar sin palabras. Alejandro Nemonio Aller, dejó constancia con su poesía de imágenes del bello acto en el que los asistentes sintieron y gozaron. ¡Gracias Alejandro Nemonio Aller! Si queréis comprobar todo lo que he dicho, haceros con ese precioso poemario titulado “Querencia Recíproca”. Lo vais a disfrutar de lo lindo.
Manuela Bodas Puente – Veguellina de Órbigo.