La onubense revalida el título en China tras un duro partido contra la taiwanesa Tai Tzu Ying.
Carolina Marín ha vuelto. La exnúmero 1, que ha pasado ocho meses recuperándose de una grave lesión de rodilla, se ha llevado el título del Abierto de China al ganar a la taiwanesa Tai Tzu Ying por 14-21, 21-17 y un igualado 21-18. Un duro partido en el que Marín tuvo que remontar ante una exnúmero 1 del mundo.
El primer set empezó como en los partidos de cuartos y semifinales, con Marín entrando algo tarde en el juego. A la onubense le está costando arrancar en su bádminton en los partidos, probablemente por temor a que su rodilla le dé otro susto aunque ella misma admite que ya va recuperando sensaciones. Tai Tzu Ying lo aprovechó y estiró su ventaja en el primer juego hasta llevárselo por 14-21.
Fue en el segundo donde la triple campeona del mundo española sacó la garra. Con su servicio mucho más asegurado, Marín igualó la contienda con un 21-17 que dejó claro a la taiwanesa que no iba a ser fácil llevarse este Abierto de China.
Mucho más igualado estuvo el tercer set, al menos hasta que se llegó a un 13-13 en el que Carolina Marín echó el resto con el saque. Con su servicio obtuvo la ventaja máxima del torneo con un parcial de cinco puntos definitivos hasta el 19-13. La asiática no tiró la toalla y llegó a ponerse 19-17, pero Marín tiró de épica y caracter para resistir y llevarse la victoria definitiva en su segundo punto de partido.