El año 2012, cuando se cumplió el primer centenario de la tragedia del Titranic, la Fundación que lleva su nombre decidió la creación de un Patronato de Honor formado por personalidades, de todo el mundo, que, además de tener una relación directa con la historia del Titanic, fuesen, en su comportamiento, fieles a la leyenda que presidia la vida a bordo del “buque de los sueños”: EL HONOR Y LA GLORIA POR ENCIMA DEL TIEMPO”.

 

Los nuevos Patronos de Honor, Rafa Nadal y Luís del Olmo, recibieron, de manos del Presidente de la Fundación Titanic, Jesús Ferreiro, en la sala central del “Rafa Nadal Museum Xperience”  las correspondientes placas acreditativas de sus títulos como Patronos de Honor, actuando como testigo Enrique López Veiga, Presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo y también Patrono de Honor.

 

De esta forma, los nombres de Rafa Nadal y Luís del Olmo, se unen, para formar parte del Patronato, a los de S.M. La Reina de Inglaterra e Irlanda del Norte, S.M.  Elisabeth II; Ex Presidente de la Republica Francesa, 

François Hollande;  Ex Presidente de los EE.UU. de Norteamérica,  Barack 

 

Obama;   Princesa Elettra Marconi, hija de Guillermo Marconi;  Clive 

Palmer; Vicente Zaragüeta;  Ernesto Páramo; Enrique López Veiga y José López Cortés.  

 

Rafa Nadal, al recibir su nombramiento como Patrono de Honor de la Fundación Titanic,  recordó el heroico comportamiento de Richard Norris, un joven tenista norteamericano, pasajero de primera clase,  que estuvo, hasta los últimos momentos, ayudando a subir a los botes salvavidas a las mujeres y los niños, quedándose él a bordo hasta que el agua inundó las cubiertas altas.

 

Cuando ya no quedaban botes salvavidas, el joven tenista se lanzó al mar, agarrándose a una balsa salvavidas que había volcado, por lo que permaneció,  casi seis horas, con medio cuerpo sumergido en las heladas aguas, hasta que fue rescatado por el Carpathia.

 

Cuando llegaron a Nueva York y fue conducido al Hospital de Sant Louis, los médicos le aconsejaron, dada la gravedad de las lesiones producidas por la baja temperatura de la mar, y con el fin de poder  salvar su vida, la amputación de sus piernas.

 

Richard Norris se negó a que le amputasen las piernas y, milagrosamente, cuatro meses después, ganaba la US Championship, en 1912 , volviéndola a ganar en  1914 , 1916. 1925 y 1926. En 1920 ganó el Torneo de Wimbledon y en 1914, 1925 y 1926 se adjudicó la Copa Davis.

 

Rafa Nadal sugirió a Jesús Ferreiro, que,  la ejemplar historia de este joven tenista norteamericano,  debería formar parte de la exposición internacional “Titanic The Reconstructión”, la única exposición oficial de la Fundación Titanic, y que estos días se puede visitar en el Centro Comercial Thader, en Murcia, a lo que el presidente de la Fundación Titanic prometió su inclusión en visita a la  exposición.

 

Por su parte, Luís del Olmo, al recibir su nombramiento dijo:

 

““Estoy muy agradecido a mi amigo de tantas aventuras radiofónicas,  Jesús Ferreiro, por haberme elegido como nuevo Patrono de Honor de la Fundación Titanic.  Agradecimiento que se multiplica por mil porque hoy también se nombra Patrono de Honor al mejor deportista que tenemos en España, Rafa 




 

Nadal, el más grande entre los grandes……

 

En este entrañable acto quiero recordar a Guillermo Marconi, inventor de 

la radio, y a su hija, mi buena amiga la princesa Elettra Marconi, que 

también forma parte de este ilustre Patronato……..

 

Su padre, Guillermo Marconi,  dirigió personalmente la instalación de los equipos de radio trasmisión  del Titanic, lo que permitió las llamadas de socorro y el salvamento los 712 supervivientes………pero hoy no deseo olvidarme del ejemplar comportamiento del radio telegrafista Jack Phillips, que, con solo 25 años, perdió su vida en el naufragio por quedarse trasmitiendo las llamadas de socorro hasta que el agua inundó la cabina de trasmisiones….””

 

Tanto Rafa Nadal como Luis del Olmo, prometieron intentar ser ejemplares en hacer suya  la frase que presidía el cuadro de la gran escalinata del Titanic: EL HONOR Y LA GLORIA POR ENCIMA DEL TIEMPO, y colaborar en una de las principales misiones de la Fundación, luchar por la conservación del medio ambiente, sobre todo,  por la limpieza de los mares.