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La comunidad de Castilla y León ha sufrido el éxodo en diez años (2008-2018) de 151.613 personas, cifra que supone un poco más que los habitantes de Salamanca. Este dato, junto a otros de la situación poblacional de la región, se desprende del informe: ‘Fiscalización de la aplicación de las medidas aprobadas por las Cortes en materia de despoblación en las entidades locales’ elaborado por el Consejo de Cuentas. Ante esta situación la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores de Castilla y León (UATAE CyL), ve “una oportunidad para afrontar, a través del trabajo por cuenta propia, el reto demográfico de la despoblación de las zonas rurales del territorio español”.
Actualmente el 85% del territorio de nuestro país corresponde al mundo rural pero tan solo encarna al 20% de la población total. Mientras, la diáspora hacia las ciudades -y especialmente fuera de la región, hacia Madrid- se ha visto aumentada por falta de oportunidades en el medio rural, UATAE CyL insta a la creación de “políticas efectivas que garanticen los relevos generacionales en los proyectos de autoempleo y micropymes viables así como que fomenten nuevos emprendimientos con el asesoramiento, la formación y la financiación adecuadas”. Por ello, la Unión de Autónomos de CyL considera la necesidad de hacer frente a esta situación mediante el impulso de la digitalización de los trabajadores y trabajadoras autónomas del entorno rural así como potenciando los sectores del turismo sostenible, la agricultura y ganadería, la vinicultura o las energías limpias, sin olvidar que la condición de ser una de las regiones europeas más ricas en biodiversidad o la de segunda comunidad española con mayor media de edad abre oportunidades importantes en sectores forestales, turísticos o de los cuidados. “Se trata”, insisten desde UATAE CyL, de “apostar por esos posibles nichos de desarrollo fomentando y consolidando el autoempleo como herramienta que permita dinamizar y vertebrar el tejido productivo, devolver vida a nuestros pueblos y ofrecer una alternativa de regreso a muchos y muchas jóvenes castellanoleoneses y de atracción de gente de otros orígenes”.
UATAE CyL considera que todavía resulta posible y se está a tiempo de apostar por la regeneración de las zonas despobladas de la región, para impedir que la brecha actual que se da entre las zonas rurales y las urbes, y entre Castilla y León y otras comunidades, se vea acrecentada. En la actualidad la población de la comunidad ha disminuido en cuatro décimas su peso poblacional, ocupando el 5’1%, sobre el total de España. Además, mientras que la población en nuestro país en los últimos dieciocho años se ha visto incrementada en un 14’3%, en contrapartida en Castilla y León disminuyó un 1’9%, situación dada por el descenso notable (entre 2008 y 2018) que afecta a las principales ciudades de la región. Encabezada por Zamora (-11,5%), Ávila (-7,7%) y León (-7,2%), mientras que el menor descenso lo afronta Valladolid (-1,7%).
La crisis económica actual derivada de la crisis sanitaria debe establecerse como una oportunidad para forjar el debate en torno a los nuevos modelos productivos y de cohesión social y territorial. Por ello, UATAE CyL, insta a todas las administraciones (Gobierno central, Junta de Castilla y León, diputaciones y ayuntamientos) para que además de las medidas urgentes de ayudas hacia el colectivo de los autónomos, se coordinen para apuestar por el desarrollo local y comunitario que permita hacer frente a la situación de gran calado que atraviesa la comunidad con la situación de despoblación de gran parte de los territorios. La Unión de Autónomos de CyL está abierta a establecer nuevos canales de diálogo que permita construir proyectos que fomenten el autoempleo y por tanto que den solución a la realidad actual. |
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