Desde el grupo municipal UPL de San Andrés del Rabanedo queremos mostrar nuestra sorpresa tras las declaraciones que ayer realizó el senador por León, Antonio Silván, en las que defendía poner freno al desmantelamiento de la industria ferroviaria en la provincia de León y más concretamente en los talleres ubicados en los municipios de San Andrés y León.
Es realmente triste que una persona que ha tenido tanto poder como alcalde de una capital de provincia y consejero de Fomento de una comunidad autónoma durante largos años de mano de un partido que gobernaba en prácticamente todas las instituciones, venga ahora, cuando está sentado en la fila de la oposición, a ondear leonesismo y hablar de agravios para León. Nos deja atónitos señor Silván.
Las políticas centralistas del PP junto con las del PSOE son una de las principales causas de que nuestro municipio y nuestra Región Leonesa esté en esta decadencia socioeconómica. Al menos, senadores y diputados del PP y PSOE, tengan la decencia de no exigir a otros lo que ustedes y sus partidos no hicieron durante décadas porque, para qué nos vamos a engañar, León para sus partidos no es importante, no da votos, no interesa una vez que entran en el gobierno.
Desde UPL exigimos a los dos partidos gobernantes en la Autonomía y en el Estado que, si de verdad tienen interés en conservar los empleos del sector ferroviario en la provincia, hagan algo cuando tienen poder para hacerlo, y no esperen a sentarse en la oposición para ir de víctimas.
En UPL llevamos luchando por el mantenimiento de los talleres ferroviarios en la provincia muchos años. Muchas mociones y propuestas, como la que Silván pide ahora, han sido presentadas por nuestro partido en diferentes legislaturas y con diferentes gobiernos como son las presentadas en mayo y octubre de 2013 o la de enero de 2015. Todas ellas fueron ignoradas precisamente por partidos como el que ahora las reclama con tanto fervor. Les invitamos a ser así siempre, gobiernen o no gobiernen, mejor nos iría en esta tierra.
Y es que si León agoniza, lo hace mediante una cuerda tensada por dos extremos llamados PP y PSOE.