El colegio CEIP Cervantes de la ciudad de León ha sufrido en los últimos meses cinco robos, así como destrozos en el mobiliario, así como rompiendo las ilusiones de los niños y niñas del centro al romper también sus juegos y actividades.
Parece como que los desalmados han tomado como centro de sus actividades delictivas este centro educativo sin que hasta la fecha, a pesar del interés de la policía municipal, se haya logrado detener a los autores materiales de estos hechos.
Por ello, desde el Grupo Municipal de UPL en el Ayuntamiento de León instamos al equipo de gobierno del PSOE que reconociendo la competencia impropia que debería de resolver la Junta de c. y León proceda a la instalación de alarmas con detección de presencia para intentar evitar este tipo de actividades que evidentemente perturban la normal actividad colegial.