‘El viaje para conocernos’ es un innovador proyecto en el que tres viajeros de diferentes perfiles visitan los principales enclaves turísticos, culturales y patrimoniales de Castilla y León, mientras se mide su actividad cerebral. Para ello, utilizan una gorra con 2.048 microsensores y una cámara subjetiva, que recoge en tiempo real su actividad cerebral al visitar cada enclave turístico.
El consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, ha presentado hoy el innovador proyecto de neuromarketing ‘El viaje para conocernos’ (elviajeparaconocernos.com), como complemento a la campaña turística de publicidad convencional, presentada recientemente, ‘¿Y tú, ¿cuándo vienes?’. Se trata de una iniciativa de comunicación pionera en el ámbito del sector turístico, que tiene como objetivo analizar el impacto emocional de las diferentes vivencias que un visitante puede disfrutar en Castilla y León. En este sentido, el consejero ha señalado que el objetivo es conectar con diferentes segmentos del público objetivo, de una manera mucho más relevante para ellos: “Se trata de una experiencia totalmente pionera en el mundo y que nos permite seguir avanzando en las nuevas tendencias que marcarán la promoción turística de Castilla y León del futuro, incorporando la tecnología, en este caso de neuromarketing, para demostrar la promesa que hacemos en nuestra publicidad y, sobre todo, para sorprender e inspirar a todo tipo de viajeros”.
Trabajo de investigación
Esta iniciativa permitirá recoger información y datos sobre la percepción que tienen viajeros con diferentes motivaciones y que serán el punto de partida para iniciar en el futuro una investigación, que ayude a identificar los diferentes tipos de estímulos que ofrece Castila y León como destino turístico. Es una campaña que la Consejería ha definido a partir de una nueva estrategia promocional en la que viene analizando las actuales tendencias del mercado turístico y en la que se ha observado que los turistas no sólo buscan un tipo concreto de turismo, ya sea de playa, monumental, enológico o gastronómico, sino también desean realizar otras muchas actividades para disfrutar al máximo de sus vacaciones. A este respecto, el consejero ha afirmado que los turistas buscan un destino completo, que les aporte una experiencia integral y no sólo centrada en una motivación o actividad concreta, “y ahí es donde precisamente encontramos la oportunidad y el elemento relevante y diferenciador de Castilla y León como destino turístico, porque Castilla y León es uno de los destinos más amplios y heterogéneos del mundo”.
En este proyecto se midió por primera vez en tiempo real la actividad cerebral de tres turistas de diferentes perfiles mientras visitaban los principales enclaves turísticos de las nueve provincias de Castilla y León. Para ello, se utilizó una innovadora gorra que lleva incorporada una cámara frontal y una malla invisible con 2.048 microsensores que recogieron durante cuatro días la actividad cerebral de los turistas transformándola en datos. Gracias a esta tecnología, se analizaron más de 48 horas de actividad cerebral, lo que ha servido para conocer las emociones que despertó cada enclave turístico en cada tipología de viajero, pudiendo saber qué fue lo que más llamó la atención a cada turista y cuáles fueron sus verdaderas emociones durante el viaje.
Esta campaña fue protagonizada por el chef, Fabián León (@Fabianmasterchef), la viajera Sara Caballero (@lamochiladesara) y el aventurero David Castelló Fernández (@OceanLifeDC), quienes recorrieron 1.233 kilómetros durante cuatro días de viaje en los que visitaron algunos de los principales enclaves patrimoniales y naturales de las nueve provincias de la Comunidad. Asimismo, en cada localidad visitada pudieron disfrutar de la gastronomía y enología típica de cada zona de Castilla y León.
Avance de las conclusiones
El análisis de los datos de actividad cerebral de los tres tipos de visitantes que fueron objeto de este estudio permitió extraer numerosas conclusiones, como que los estímulos que mayor activación emocional positiva generan son aquellos desconocidos y más sorprendentes para cada persona. Así, el chef sintió más intensidad emocional en actividades en la naturaleza; la viajera sintió más intensidad emocional en actividades relacionadas con la gastronomía y el aventurero sintió más intensidad emocional en actividades culturales.
Las emociones más sentidas fueron optimismo, asombro, disfrute, sorpresa y curiosidad. Todos los destinos visitados y las actividades realizadas han evocado emociones positivas en los participantes y el 61% de esos destinos y actividades han provocado en alguno de los participantes un cambio significativo en su estado emocional, pasando de neutro o negativo a positivo. Las emociones más intensas vividas en relación con los recursos naturales, han sido calma y placer. En los recursos culturales, asombro y admiración y en los recursos gastronómicos, satisfacción y placer. El 72% de las experiencias emocionales intensas sorprendieron a los participantes. El 68,2% de los picos de activación emocional positiva vividos en los lugares/actividades provocan un estado de ánimo positivo de más de cuarenta minutos, el 21,3% de más de 50 minutos y el 10,5% de más de una hora.