Solo el sector industrial logró resistir el envite del paro en León en el mes de noviembre que sumó 553 desempleados más, la inmensa mayoría del sector servicio. Un incremento mensual del 2,53% que contrasta con la caída del paro a nivel nacional del 0,89% y está por encima de la subida registrada en Castilla y León del 1,62%, donde únicamente Valladolid logró reducir el desempleo y aumentar su número de afiliados.
Son tres meses consecutivos de aumentos del desempleo en la provincia que dejan la cifra de demandantes en 22.452 personas, lo que trasluce el enfriamiento de la economía y sus efectos en el empleo en la última parte del año, como ya habíamos anticipado en meses anteriores.
Sin embargo, el saldo final sigue siendo positivo ya que el paro ha descendido un 7,48% respecto a noviembre de 2022, con 1.814 parados menos que hace un año.
En cuanto a las afiliaciones, León registró un descenso del 0,37% en el número de cotizantes a la Seguridad Social respecto al mes anterior, hasta los 166.115 afiliados, 616 menos que en octubre. En cuanto a la variación interanual la provincia vio crecer sus cifras de afiliación un 1,85%, por debajo de la media de la Comunidad (2,10%) y del conjunto nacional (2,58%).
La valoración general que podemos hacer desde el Círculo Empresarial Leonés es de preocupación por el balance negativo que arroja el mercado laboral a lo largo del otoño. Perdemos afiliados y ganamos parados, a la espera de que el mes de diciembre pueda compensar en parte la destrucción de empleo de los últimos tres meses en la provincia.
Ante la polarización política que impide las reformas estructurales que requiere la economía, reclamamos como empresarios mayor estabilidad, seguridad jurídica y un mínimo de consenso para abordar cambios que redunden en una mayor productividad. Pedimos a los políticos centralidad y moderación, que se incentive la actividad económica y no que se la penalice menguando nuestra competitividad.