Desde que había leído en el tablón de anuncios que se había perdido una maleta con “Dinero Negro”, su afán desde la mañana a la noche era pensar dónde podría estar aquel tesoro de la maleta. Ese si que era un tesoro, nadie lo podía reclamar, así que estudió y repasó el recorrido de la maleta. Según algunos testigos la maleta había viajado desde un banco a una casa particular del pueblo de Villarejo de Órbigo. Después de comer, dibujó con las migas que se habían caído en el hule de la mesa un mapa ficticio, sin ni siquiera ser consciente. Se sobresaltó al ver el trazado que habían formado las migas. Ahora ya sabía dónde estaba la maleta. Trazó un plan que le llevó varios días, luego se lo explicó a su mujer que supo al fin, qué le pasaba a su marido, llevaba días divagando y alelado; que aunque ya lo era, alelado quiero decir, llevaba unos días en los que aún lo estaba mucho más. La mujer se echó las manos a la cabeza cuando su marido le enseñó la maleta. El plan de su marido había dado resultado, pero ella no quería aquel dinero, aunque…, bien pensado no era delito gastarse un dinero que no existía realmente.

Las cosas se complicaron porque apareció un muerto que, al parecer, algo tenía que ver con el dinero. También estaba la mafia de por medio. Un cuñado, una cuñada, un corrupto policía, la inspectora de policía, una vecina de las que les gusta oler lo que se cuece en casa ajena, una taxista lista y estupenda que resolvió el caso sin ni siquiera quitarse la gorra.

Lamiguería: No puedo decir nada más, solo remarcar que el pasado día 15 de julio en la sala Fundos de Veguellina de Órbigo, salimos con dolor de barriga de tanto reírnos.

Es de bien nacidos el ser agradecidos y desde luego, pongo un GRACIAS mayúsculo al grupo teatral “Villarregia” de Villarejo de Órbigo, por su extraordinaria representación de la obra “Dinero negro” de Ray Cooney, traducida por José Miguel Rivero. El acto estuvo organizado por la asociación de Villarejo de Órbigo: “Ajusmar” así como por la junta vecinal de Villarejo de Órbigo  con la colaboración del ayuntamiento.

Cada actor y actriz pusieron su mejor lado para hacernos pasar un rato muy bueno. Parecen profesionales, como si toda su vida hubieran trabajado en el teatro incluido el director del grupo Villarregia,  que está haciendo una labor preciosa.  No os perdáis el próximo 15 de agosto su representación en Villarejo de Órbigo, porque la risa alegra el corazón.

Manuela Bodas Puente – Veguellina de Órbigo.