Así es, Mercedes González Rojo reparte versos como si fueran migas de la gran hogaza de la cultura. Esas migas saben a gloria, en cualquiera de sus poemarios, tenemos disfrute y sabor de amor por las letras; pero en el poemario que nos presentó el pasado viernes en la biblioteca “Río Órbigo” de Veguellina de Órbigo, también están presentes las ilustrapoemas de Carmen García Ordás.
Me gusta, si me gusta la palabra ilustrapoemas, porque encierra el significado de poesía en las ilustraciones, que es la que nos ofrece Carmen con juegos exquisitos de dibujos donde la imaginación y la creatividad danzan al unísono.
No es la primera vez que estas dos mujeres se conjugan y se encuentran en lugares donde la magia de las palabras y los trazos dialogan en perfecta armonía. En el poemario titulado “Poemas para días de sol y lluvia”, inicialmente dirigido para niños, aunque como Mercedes nos dijo muy claro, la poesía es válida para todos, sin distinción ni clasificación, las ilustraciones están en blanco y negro. Según la autora a posta, es decir, una decisión tomada para que los niños o adultos que se acerquen al libro, puedan sacar a pasear sus lápices de colores y sean también actores de hecho en el libro. Una iniciativa preciosa, ya que, un suponer, los padres pueden jugar con sus hijos a colorear los poemas en unión y compañía, quien dice padres, puede decir abuelos, tíos, amigas, etc., vamos que hasta para terapia de grupo puede valer.
En el poemario no faltan buenas migas de reflexiones sobre la migración, la muerte, también un guiño a la tradición, leyendas, como la del gato maragato, historias, como la de Don Quijote, pero lo mejor es adquirir el libro y disfrutarlo, en sus páginas nos encontraremos acogidos por la creatividad y el esmero para conseguir una obra bien linda.
Otra razón para gozar este poemario, es el mimo y cuidado con los que la editorial “Lobo Sapiens”, trata esta obra. También se ha cuidado el papel, para que puedan usarse los colores y divertirse de lo lindo mientras fluyen los poemas.
Lamiguería: Para despedirnos con buen sabor de boca, poso en las siguientes líneas, unos versos del poema:”Historia de Don Quijote”.Hubo una vez en la Mancha / un lugar imaginario / donde vivía un señor / un poquito estrafalario / Llamábase D. Quijote / quien era Alonso Quijano / y salió a correr el mundo / junto a su escudero Sancho. / Cabalgaba en un rocín, / que era un caballo muy flaco, / convirtiendo en aventura / lo que le salía al paso…
Manuela Bodas Puente – Veguellina de Órbigo