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En San Andrés del Rabanedo, el tercer municipio más grande de la provincia de León, nos encontramos sumidos en una creciente ola de indignación ciudadana. No es una cuestión de ideologías ni de colores políticos, sino de respeto a la democracia y a quienes sostienen con su esfuerzo el funcionamiento del municipio, sus vecinos.
Cada vez somos más los que denunciamos una actitud inaceptable en la gestión política del ayuntamiento, la ausencia reiterada de sus gobernantes para rendir cuentas ante la ciudadanía. Las preguntas se acumulan, las preocupaciones crecen y, sin embargo, quienes deberían dar la cara se esconden tras el parapeto del silencio, quizás su no exclusiva dedicación a la gestión municipal solo les deja tiempo para esquivar su responsabilidad de responder a quienes les otorgaron su confianza en las urnas.
Un Ayuntamiento que No Escucha
Los ciudadanos de San Andrés del Rabanedo llevamos casi dos años esperando explicaciones sobre asuntos fundamentales, más allá de aquella desafortunada respuesta que dio la Sr. Alcaldesa a la pregunta de un periodista “más bien poco” a la pregunta que decía “que han hecho en sus primeros 6 meses de mandato?”, los ciudadanos no hemos podido disfrutar de nuevo de su gran elocuencia.
¿Por qué se invierte en unas áreas mientras se descuidan otras esenciales?, ¿por qué calles y aceras siguen en estado deplorable?, ¿por qué los servicios públicos son deficientes?, ¿por qué se pierden subvenciones y ayudas?, ¿por qué no hay foros abiertos y transparentes para que los vecinos planteen sus inquietudes?……y así, un largo etc…
En los plenos públicos las cosas se explican muy bien (es sarcasmo), pero 29.000 ciudadanos ni caben en el salón de plenos ni tienen tiempo de escuchar 4 horas de comentarios dispersos y discusiones de patio de colegio.
El problema no es solo la gestión discutible de los recursos municipales, sino la absoluta falta de comunicación y rendición de cuentas. No se trata del capricho de unos cuantos, es una exigencia legítima en cualquier sistema democrático.
La Estrategia del Desgaste: Callar Hasta que el Pueblo se Rinda
El manual del político cobarde es bien conocido:
1. Evitar dar explicaciones a toda costa o cuando las da evadir las respuestas a lo que se pregunta
2. Dejar que el tiempo pase, esperando que la indignación se disipe
3. Aparecer solo en los momentos oportunos, solo si hay prensa y cámaras
Pero en San Andrés parecen olvidar es que la paciencia ciudadana tiene un límite. Y cuando ese límite se sobrepasa, la respuesta puede ser contundente, movilizaciones, denuncias públicas y, llegado el momento, castigo en las urnas como es de esperar.
¿Para Quién Gobiernan?
La pregunta clave sigue sin respuesta, ¿para quién gobierna la UPL?, porque si fuera para la ciudadanía, escucharían sus voces y responderían con hechos. Pero cuando el gobierno local solo se manifiesta en los actos protocolarios, o cuando hay que posar para la ¡¡FOTO!!, el mensaje es claro: no gobiernan para la gente, gobiernan para sí mismos.
San Andrés del Rabanedo no necesita políticos que se escondan, sino líderes valientes que den la cara, que expliquen sus decisiones y que acepten el escrutinio público. Porque la democracia no se basa en votar cada cuatro años y desaparecer, sino en un diálogo continuo entre gobernantes y gobernados. Y si los actuales dirigentes no están dispuestos a asumir su responsabilidad, los ciudadanos de San Andrés del Rabanedo se encargarán de recordárselo.
Las trayectorias intachables se forjan en el tiempo y con los hechos. Hacer un milagro no te convierte en santo, hay que hacer muchos y bien.
Los ciudadanos EXIGIMOS al equipo de gobierno, comparecencias públicas en cada uno de los núcleos urbanos de San Andrés del Rabanedo para rendir cuentas de la gestión municipal y responder a las preguntas de los ciudadanos.
¡¡¡¡CUANTO ANTES!!!!
Debido a estas premisas convocamos esta encuesta para conocer vuestro parecer. Rogamos compartáis esta información con vuestros contactos que residan en el municipio.