Había marcado Piqué, era el homenaje a Cruyff, Ramos pedía a gritos una expulsión, la Liga parecía acabada… pero el Real Madrid dio este sábado una lección de coraje y se llevó tres puntos de un Camp Nou que asistía atónito a una remontada imprevista.
El Barça pecó de conformismo con el 1-1 en el marcador, pensando quizá en esa visita al dentista que es jugar contra el Atleti (el martes, cuartos de la Champions) y se llevó un revolcón que le va a impedir relajarse en Liga para centrarse en el máximo torneo continental.
Tras un inicio más que emotivo en el homenaje a Cruyff, el partido empezó a transcurrir como viene siendo habitual en los últimos años: la posesión para el Barça, y el Madrid esperando. Esta situación provocó que los blancos empezaran a recibir pronto tarjetas. Carvajal y Ramos la vieron antes del minuto 20, en el que por cierto, Keylor sacó un balón a Rakitic.
Poco después, primera jugada polémica del partido: los azulgrana pidieron penalti de Ramos sobre Messi. Al principio parecía claro el contacto, si bien no el lugar (dentro o fuera del área), pero en sucesivas repeticiones se vio como el de Camas tocó levísimamente el balón, lo justo para que no fuera pena máxima.
Hasta el descanso, el ritmo no se aceleró. Era el Barça el líder destacado y al Madrid tampoco le importaba no tener la pelota. Pero a la vuelta de vestuarios, todo se desató.
Llegan los goles
En el 11 del segundo tiempo y tras un paradón de Keylor a una vaselina de Messi y una sucesión de saques de esquina, Gerard Piqué se desprendió de Pepe y cabeceó picado a la red el gol que abría el marcador. Pocos como el 3 culé con más ganas de marcarle al Madrid.
Pero casi sin tiempo para reaccionar, Marcelo, el mejor del Madrid junto a Bale, se inventó una jugada personal que acabó en centro de Kroos. Tras tocar en un defensa culé, Benzema, de media chilena, la metió dentro.
Era el minuto 62 y fue entonces cuando el Barça empezó a pensar más en Europa que en la Liga. El empate no le valía al Madrid y al Barça tampoco le iba mal, sobrado como estaba de puntos de ventaja. El Madrid lo vio y decidió poner una marcha más. Primero, con un gol de Bale que el árbitro anuló a instancias del línea, por considerar que el galés se apoyó sobre los hombros de Alba. Luego, con un remate de Cristiano que besó el larguero. Y luego, con una llegada de Bale que desbarató Mascherano.
Cuando mejor estaba el Madrid, Ramos vio una segunda amarilla muy merecida. El sevillano, descentrado, se la jugó hasta en tres ocasiones y al final acabó expulsado. Pero lejos de parecer un parón en las aspiraciones blancas, dos minutos después llegó el éxtasis blanco.
Bale, una pesadilla para Alba, centró para que Cristiano, discreto el resto del partido, controlara con el pecho para quitarse de encima a Mascherano y remachara a la red.
No hubo tiempo para más. El Barça se complica un poco la Liga cuando la podía haber sentenciado y el Madrid se lleva una enorme inyección de moral para el tramo final de la temporada. Zidane se convirtió así en el tercer entrenador del Madrid, tras Queiroz y Schuster, que gana en su debut en el Camp Nou.
Ficha técnica:
- Barcelona: Bravo; Alves, Piqué, Mascherano, Alba; Busquets, Rakitic (Arda Turan, min.73), Iniesta; Messi, Neymar y Luis Suárez
- Real Madrid: Keylor; Carvajal, Pepe, Ramos, Marcelo; Casemiro, Modric, Kross; Bale (Lucas Vázquez, min.90), Benzema (Jesé, min.78) y Cristiano.
Goles: 1-0, min. 56: Piqué. 1-1, min. 62: Benzema. 1-2, min. 84: Cristiano.
Árbitro: Alejandro José Hernández Hernández (comité canario). Mostró cartulina amarilla a Sergio Ramos (min. 10), Carvajal (min. 17), Luis Suárez (min. 27) y Mascherano (min. 28). Expulsó a Sergio Ramos (min. 82) al ver la segunda amarilla.
Incidencias: partido correspondiente a la trigésima primera jornada de la Liga disputado en el Camp Nou ante 99.264 aficionados, que llenaron el estadio azulgrana. En los prolegómenos del partido, un mosaico de 90.000 cartulinas homenajeó a Johan Cruyff, fallecido la semana pasada a los 68 años.
EDU CASADO
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